La disputa entre Mauro Icardi y Wanda Nara sumó un nuevo capítulo con la reciente presentación judicial del futbolista, que denunció que la madre de sus hijas estuvo fuera del país 36 de los últimos 40 días, señalando la ausencia de información precisa sobre el cuidado de las menores. La intervención de Elba Marcovecchio, abogada de Icardi, acompañó este recurso en Tribunales y marcó el tono de una acción que apunta directamente a la responsabilidad parental.

De acuerdo con los documentos presentados por la defensa de Icardi, el jugador del Galatasaray sostiene que, durante extensos periodos en los que Nara realizó viajes laborales o personales a distintos destinos (incluidos España, México y Estados Unidos), él no contó con certezas sobre quién quedaba al resguardo diario de las niñas. “30 días afuera del país, en 41 días que las niñas estaban a la deriva”, consta en la denuncia a la que tuvo acceso y mostró la producción de DDM (América TV). Zaira Nara, hermana de Wanda, fue una de las figuras señaladas como cuidadora eventual, según dejaron ver las redes sociales.

El conflicto escaló ante la presunta falta de comunicación entre Icardi y sus hijas. Según la abogada Marcovecchio, se notificaron incumplimientos graves en el régimen de contacto pactado judicialmente. “Hay bloqueos, le cortan la llamada, le dicen una hora y a esa hora las nenas no están, se están bañando, están cenando y así Icardi nunca puede ver a sus hijas”, relató el periodista Guido Záffora en el programa conducido por Mariana Fabbiani, mientras la letrada confirmaba la existencia de un impedimento para el vínculo paterno-filial.

Icardi pidió la recusación del juez Hagopian por presunta parcialidad y busca la restitución internacional de sus hijas (REUTERS)

La estrategia legal implementada por el jugador llevó, además, al pedido de recusación del juez Hagopian. Según detalló el periodista Gustavo Méndez, Icardi solicitó que se aparte al magistrado del caso por presunta parcialidad y por permitir “caprichos” de la contraparte. Este movimiento busca habilitar nuevas vías para una posible restitución internacional de las menores, medida contemplada en la normativa para casos en los que se alega cambio de centro de vida sin consenso entre los progenitores.

A esta dimensión judicial se suma ahora una revisión pública de los viajes y actividades de la empresaria, documentados tanto por la prensa como por la propia Wanda en redes sociales. “Cada vez que está en Ezeiza hay una cámara o ella misma postea las distintas actividades que hace en cada uno de sus viajes, y en algunos podemos ver que pueden ser actividades laborales, como en otros, en España, no pareció que así fueran. Era un viaje que estaba con Elián”, explicó Marcovecchio durante su comunicación con DDM en referencia a L-Gante.

El trasfondo de este litigio incluye el debate sobre el centro de vida de las menores, concepto clave en los procesos de restitución internacional. Según la versión de la defensa de Icardi, las hijas residieron durante los dos años anteriores bajo el cuidado exclusivo de su padre en Turquía, argumento que refuerza su reclamo de ver a las menores y mantener una relación constante, aún cuando la madre se encuentre fuera del país. “Cuando vos tenés un expediente de restitución internacional en donde el principal planteo es el centro de vida de las nenas es Turquía, porque vivían en Turquía a cargo de su padre, durante los dos años anteriores estuvieron a cuidado prácticamente exclusivo de su padre, es esto mismo lo que se está remarcando”, explayó la letrada.

La empresaria enfrenta cuestionamientos sobre sus viajes y la exposición de sus hijas en redes sociales

Marcovecchio también destacó la importancia de mantener la comunicación entre ambos progenitores y las hijas, más allá de las diferencias judiciales. “En donde es fundamental que se mantenga la comunicación con el otro”, sostuvo durante su charla en el ciclo televisivo, haciendo referencia a la obligación jurídica y al impacto emocional en las menores.

Además, expuso otro punto central del reclamo: el pedido de restringir la publicación de imágenes de las niñas en redes sociales o medios, sea de forma directa o a través de terceros. “Reiteradamente pedimos y pedimos que se restrinja la publicación de imágenes de las nenas, sigue sucediendo mucho de eso”, advirtió la defensa de Icardi, que también denunció la participación de otras personas en la exposición mediática de las menores.

Sobre la interlocución con la contraparte, Elba Marcovecchio reconoció que, en este caso, la resolución del conflicto no depende únicamente del diálogo entre abogados, ya que —según su perspectiva— “cuando vos tenés un discurso materno que es totalmente incompatible o contradictorio con sus actos”, resulta difícil llegar a una solución constructiva. La representante legal insistió en que los reclamos de Icardi responden a preocupaciones concretas sobre el bienestar y la estabilidad emocional de sus hijas.