El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, y la alta representante de la UE para Asuntos Exteriores, Kaja Kallas, conversaron este lunes por teléfono sobre el conflicto entre Israel e Irán, y acordaron seguir en contacto ante los próximos acontecimientos.
“Durante la conversación, el secretario Rubio y la alta representante Kallas reafirmaron su compromiso de mantener un estrecho contacto con sus aliados y socios”, apuntó la portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce, en un breve comunicado.
La llamada telefónica se produce el día antes de que Kallas aborde con los ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE), a través de una videoconferencia, la escalada del conflicto en Medio Oriente.
Los ataques entre Israel e Irán continuaron este lunes por cuarto día consecutivo y dejan ya más de 220 muertos iraníes y 24 israelíes, así como centenares de heridos, en una escalada de tensión que al día de hoy no tiene visos de detenerse.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró desde la cumbre del G7 en Canadá que Irán está perdiendo la guerra con Israel y opinó que la República Islámica debería llegar a un acuerdo que ponga fin al conflicto “antes de que sea demasiado tarde”.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo este domingo tras una conversación con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que “Irán es la principal fuente de inestabilidad regional”.
Por su parte, el primer ministro británico, Keir Starmer, consideró el lunes que los líderes del Grupo de los Siete (G7) reunidos en Canadá coinciden en su deseo de una desescalada entre Israel e Irán.
“Creo que hay un consenso a favor de una desescalada”, declaró Starmer a periodistas en la cumbre de líderes del grupo, en las Montañas Rocosas canadienses.
“Obviamente, lo que tenemos que hacer hoy es unir” esa voluntad “y dejar claro cómo se va a lograr” una desescalada, dijo.
“Pero el riesgo de que el conflicto se agrave es evidente, creo, y las implicaciones —no solo para la región, sino a nivel global— son realmente inmensas, así que la prioridad debe ser la desescalada», insistió.
Starmer sostuvo que habló con la mayoría de los líderes del G7 después de su llegada el domingo para la cumbre, y conversó por teléfono con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
En otro orden, Starmer dijo que espera —en una reunión en Kananaskis con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump— finalizar la implementación de un acuerdo comercial entre los dos aliados, en medio de la guerra arancelaria lanzada por el líder estadounidense.
El presidente francés Emmanuel Macron ha pedido moderación a ambas partes y exhortado a Irán a volver a las negociaciones sobre su programa nuclear. También responsabilizó parcialmente a Teherán por contribuir al aumento de la tensión regional.
Además, Macron expresó escepticismo respecto al papel de Rusia como mediador en Medio Oriente. El mandatario francés criticó a Trump por sus declaraciones sobre una posible anexión de ese territorio: “Eso no es lo que hacen los aliados”, afirmó.
(Con información de EFE)