La ola de frío que se extiende por la Argentina provocó un consumo récord de gas natural, con temperaturas que alcanzaron mínimas de hasta -11 grados en algunas provincias. Esta situación incrementa la demanda en más de un 25% respecto del año anterior y superó los 100 millones de metros cúbicos diarios, según estimaciones del Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS).
El Gobierno Nacional, junto con las transportistas y distribuidoras, organizó un Comité de Crisis para tomar medidas extraordinarias y garantizar el abastecimiento a usuarios prioritarios como residencias, hospitales y escuelas. Las distribuidoras interrumpieron contratos interrumpibles y firmes con ventana en industrias, y redujeron el servicio en plantas para asegurar el consumo residencial.
Pese a estas maniobras habituales en invierno, la presión insuficiente derivó en cortes de suministro residencial en algunas zonas. En Mar del Plata, la distribuidora Camuzzi implementó un operativo de emergencia luego de detectar interrupciones que se originaron por factores externos a la empresa. Según comunicó la compañía, “el sistema que abastece a la ciudad no recibió los volúmenes ni la presión necesarios para un servicio normal, producto de un sistema energético nacional altamente exigido por la ola de frío”.
La empresa detectó 1.000 usuarios con servicios afectados en el pico de la crisis, de unos 270.000 clientes en la ciudad balnearia. Este mediodía continuaba el operativo de reconexión.
El fenómeno expuso limitaciones estructurales del sistema energético, con infraestructura que no logra responder a consumos extremos. Para evitar problemas mayores, el regulador ubicado en los nichos de gas en cada vivienda interrumpió automáticamente el flujo cuando detectó baja presión. Este dispositivo, por seguridad, corta la entrada de gas al interior para evitar escapes o mezclas explosivas.
Los cortes de gas residencial se consideran inusuales porque los clientes residenciales suelen tener contratos ininterrumpibles, y cualquier interrupción implica riesgos significativos. A diferencia de la electricidad, donde un operador puede reactivar de forma remota, el gas natural requiere una reconexión medidor por medidor. El proceso involucra protocolos estrictos para evitar accidentes.
Camuzzi desplegó un operativo casa por casa en Mar del Plata. Según explicaron desde la empresa, el procedimiento consiste en tocar timbre en cada vivienda afectada, activar el regulador en la vereda y en el nicho de gas, y solicitar al usuario que encienda una hornalla. Si la llama se mantiene estable, se confirma la reconexión y se avanza al siguiente domicilio. Esta tarea demanda entre 5 y 7 minutos por vivienda y se realiza en todas las casas afectadas.
El operativo también contempla la situación de los usuarios que no se encuentran en sus domicilios. En esos casos, los técnicos dejan un aviso para coordinar la reconexión en otro momento. Además, Camuzzi mantiene una guardia permanente, 24 horas al día, para responder a los llamados de emergencia y asegurar la reconexión de los casos que surjan mientras las cuadrillas recorren la zona.
El protocolo de reconexión tiene una razón técnica y de seguridad. Salvador Gil, director del programa de Ingeniería Energética en la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM), explicó que cuando se corta el gas y vuelve el suministro, si la hornalla está encendida sin llama, el gas puede salir sin quemarse y volverse tóxico. Por eso, la reconexión requiere asegurar que no quede aire en los caños y que estén bien purgados, para evitar mezclas peligrosas.
El comunicado de Camuzzi también subrayó que los problemas de baja presión se originaron fuera de su área de responsabilidad, al no recibir el gas con la presión y caudal suficiente para mantener el servicio normal. La empresa informó que desplegó a todo su personal técnico y operativo, coordinando con otros actores del sistema para restablecer la prestación.
En la mañana del 3 de julio, la distribuidora anunció mejoras sostenidas en la presión de la red, lo que permitió iniciar el operativo de restitución. Las cuadrillas técnicas comenzaron a recorrer los domicilios para reconectar el servicio de forma progresiva. Camuzzi solicitó a los usuarios que no hayan registrado sus cortes que se comuniquen a las líneas de emergencia para organizar la visita de los técnicos y reiteró la importancia de no intentar reconectarse por cuenta propia.
Si bien el Gobierno bajó “todas las palancas”, no pudo evitar que haya cortes de gas en hogares y comercios. Fue el caso de Mar del Plata donde además se sumaron apagones. El intendente Guillermo Montenegro reunió al Comité de Crisis de la Municipalidad de General Pueyrredón y tomaron medidas para evitar una crisis mayor. Entre ellas, se dispuso la suspensión de clases para este jueves, así como todas las actividades en espacios deportivos y culturales, priorizando el funcionamiento de los servicios esenciales como hospitales y geriátricos.