Este viernes, Flavio Mendoza vivió un momento de angustia al sufrir un accidente en medio de su espectáculo de circo. Pero lejos de seguir las indicaciones médicas, o de escuchar a su propio cuerpo, el coreógrafo decidió regresar a los escenarios y continuar con sus funciones. En ese marco, el artista contó cómo vivió el suceso y cuál fue su mayor preocupación en ese instante.
Con los brillos sobre su piel, el maquillaje listo y la ropa preparada para su próxima función, Mendoza hizo caso omiso a los dolores y se preparó para retomar su rutina de trabajo. En ese contexto, el coreógrafo dio detalles de su accidente y contó cómo estaba su salud. “Me alegra poder volver a la función. Es medio una locura lo que estoy haciendo. La verdad que fue muy loco todo lo que pasó, no me lo esperaba. No tendría que estar haciendo funciones, pero siempre digo: “Tengo que hacerlo por el público”. Tenía las funciones repletas, me agarra culpa. Estoy acá con mucho dolor, pero agradecido que lo puedo contar”, comenzó diciendo el artista en diálogo con Secretos Verdaderos (América).
En la charla, Flavio también reflexionó sobre los riesgo que representa este tipo de espectáculo y contó en detalle cómo fue su accidente: “Creo que es el espectáculo más riesgoso y con más técnica que hice en mi vida. El accidente fue en el primer número que yo hago, el de la red de los trapecios volantes, que yo me elevo, es como un péndulo. Y el escenario de atrás tiene que subir a una altura y el péndulo tiene que subir a una altura. Como el escenario de atrás no subió a la altura que tenía que ser ya el tiro del motor estaba más bajo. Entonces, para poder pasar por arriba de la red yo hice fuerza, pero el motor me siguió subiendo y cuando vine para atrás me llevé puesto las luces. No tendría que haber pasado porque ahí el técnico tendría que haber abortado, es un error humano”.
En continuación con su relato, el artista reconoció que lo que estaba haciendo no era recomendable. “Le pegué tan fuerte a la luz que se cayó, muy cerca de otros artistas. Después como que perdí el conocimiento. No sabía dónde estaba, todo estaba nublado. No está bueno esto que estoy haciendo, no está bueno lo que estoy diciendo, porque no es un buen mensaje”, comentó y luego agregó respecto a su motivación para volver al escenario este sábado: “Soy muy terco, me dio mucha pena tener que abandonar la función anoche. Era al inicio de la función. Si bien la gente de anoche lo entendió, pero a mí me sucede algo. Lo tengo que tratar en terapia, pero tengo siempre una culpa y que siento que tengo que hacer algo aunque no pueda. Hoy los médicos de la clínica no me querían dejar salir porque yo tenía que estar 24 horas en observación y desde anoche hasta hoy no cumplía ese horario”.
Luego de pedir disculpas por su imprudencia, y de reconocer que está acostumbrado al dolor, los panelistas del programa le preguntaron si había pensado en su hijo Dionisio: “También lo pienso. Me siento culpable hasta por eso. Ayer, cuando reaccioné en la ambulancia, lo primero que dije fue “el nene”. Patricia me decía: “Quedate tranquilo, el nene está bien”. Yo estaba muy atontado, no sabía si el nene estaba conmigo acá o no. El nene estaba en casa con mi otra hermana”.
En esa misma línea, una de las periodistas le preguntó si su hijo estaba al tanto de su accidente, sin embargo, Mendoza comentó que decidió no decirle: “No le dije. Le dije a mi hermana que no lo dijera. Fue a ver una película. Después fue a un cumple. Este ahora me está esperando en casa. La verdad que no quería que sepa”.
“Tiene que acostumbrarse a que el papá tiene un trabajo de riesgo”, le comentó otro de los panelistas. Algo abrumado por la situación, Flavio reconoció: “Sí, él sabe. Yo me he golpeado varias veces, no como esta vez. Dio sabe que yo he tenido dolores, me ha traído hasta el hielo para ponérmelo en el pie operado y él me ha visto con operaciones. Pero la verdad trato de cubrirlo a él. Trato de enseñarle que papá trabaja de esto. No lo quiero alarmar, es muy chiquito”.
Para cerrar, Luis Ventura le consultó si había tenido más accidentes y lesiones en su carrera. “Sí, tuve millones. Tengo un clavo en el empeine. Tengo ocho hernias de discos, tengo fractura de nariz. Ayer, cuando me hacían todos los estudios, me decían: “Pero vos tenés esto, tenés aquello”. Más que nada de la parte facial, que no es por la cirugía plástica, es por otra cosa, de cuando estuve en el Bailando con Gise. Tengo muchas cosas en el cuerpo, convivo un poco con el dolor, estoy haciendo un tratamiento. Hay días que me duele mucho todo”, reveló el coreógrafo.