La cantidad de abortos realizados en Uruguay en 2024 creció por cuarto año consecutivo, luego de un ligero descenso que hubo entre 2019 y 2020. El crecimiento que se ha registrado ha sido moderado, pero constante. En el país los abortos son legales desde 2013, cuando se reglamentó la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE). 13 años después, el gobierno pretende hacer modificaciones en la ley y establecer otras atribuciones.
En 2024 hubo 12.592 consultas por interrupción voluntaria del embarazo, al tiempo que los abortos “ratificados” fueron 11.232, según las cifras del Ministerio de Salud Pública (MSP) informadas por La Diaria. Esta cantidad significa 334 casos más en comparación al 2023.
Si se analiza por edad, se reportaron que hubo 68 abortos en adolescentes menores de 15 años; 456, en el grupo que va de 15 a 16 años; 793, en personas de 18 a 19; y 3.201, en el grupo de mujeres de entre 20 y 24, el segmento que registró mayor cantidad de IVE.
Las mujeres que tienen entre 25 y 29 años, en tanto, se realizaron 2.989 abortos; hubo 2.021, en el grupo de entre 20 y 34 años; 1.666, en el de entre 35 y 44 años; y 38 en mayores de 44 años.
El número de mujeres que continuó el embarazo tras la primera consulta fue de 521.
La principal razón alegada por las mujeres que decidieron abortar fue que lo hacen por su “propia voluntad” (fueron 11.222, casi el 100%). Hubo seis que aseguraron que fueron violadas y otras cuatro que tuvieron anomalías fetales que eran incompatibles con la vida.
El viceministro de Salud Pública, Leonel Briozzo, declaró al noticiero Telemundo de Canal 12 que el aumento de los abortos puede relacionarse con un “decaimiento” en la educación sexual de los centros educativos. El jerarca criticó a la gestión de Luis Lacalle Pou porque, según consideró, “se bajaron los brazos”.
Briozzo también relacionó los casos de 2024 a la disponibilidad “adecuada” de los métodos anticonceptivos y señaló que es necesario trabajar “mucho más” en estos dos aspectos.
Respecto al embarazo de niñas y adolescentes, expresó que “siempre son producto de violencia, de violaciones, que surgen del ámbito intrafamiliar”. Las consideró situaciones “muy dramáticas”.
Uruguay fue un pionero en la región para aprobar la ley, pero ahora el gobierno se dispone a cambiar algunos artículos. Rafael Aguirre, coordinador de Salud Sexual y Reproductiva del Ministerio de Salud Pública (MSP) consideró que el país “se quedó atrás”.
Esto es porque nuevos estudios muestran que conviene someterse al procedimiento en la semana 12 de gestación, consignó El Observador. Sin embargo, la ley uruguaya solo permite que la IVE se realice hasta esa misma semana. De esta manera, muchas mujeres quedan “sin la posibilidad de tomar una decisión tras el resultado adverso de estudios diagnósticos clave”, expresó.
En Uruguay solo se permite hacerse el aborto hasta la semana 14 cuando la mujer aduce causal de violación.
El jerarca del MSP informó que en el país se va a crear un sistema informático sobre la interrupción voluntaria del embarazo, similar al que existe para los datos prenatales. La intención es “cruzar embarazos, abortos y métodos anticonceptivos”.
“En los últimos años hubo un desarme de la educación sexual en las escuelas y liceos; es clave ponerse a tiro cuanto antes porque las consecuencias pueden ser funestas”, expresó el ginecólogo Aguirre, al participar de un Congreso de Salud Sexual. El jerarca se manifestó en contra de la idea “de que muchas mujeres abortan como si ese fuera un anticonceptivo”. “Interrumpir un embarazo es de los peores momentos de decisión a los que se tiene que enfrentar una mujer”, señaló.