Al aterrizar el viernes por la noche en Buenos Aires, la sonrisa de Rufina Cabré anunciaba un regreso muy esperado. Junto a sus hermanos, Magnolia y Amancio, volvió a Argentina después de disfrutar de unas vacaciones en Turquía, aunque cambió de planes a último momento. La niña, que iba a instalarse junto a su madre y el futbolista en Estambul, decidió regresar al país para ver a su papá Nicolás Cabré y despedirse otra vez de sus amigos antes de comenzar las clases en el país turco.
En contraste, en el corazón de Estambul, la China Suárez experimentaba sensaciones opuestas: por primera vez quedaba sola junto a Mauro Icardi, enfrentando la intimidad y los nuevos rituales del comienzo en su casa compartida. Los hijos volvían al país y, para la actriz y el futbolista, la experiencia del hogar sin chicos mostraba otra cara del amor y la convivencia.
No pasaron muchas horas para que ambos dijeran presente en las redes sociales. En una postal que muestra al delantero del Galatasaray relajado en la piscina del jardín, la China dejó traslucir lo especial del instante: “Van llegando los muebles que elegimos”. Con estas palabras aludió al nuevo espacio de vida que ambos empiezan a armar juntos. Luego continuó: “Recorremos buscando lo que necesitamos, prendemos velitas, nos abrazamos y agradecemos”. El broche fue una declaración simple, pero contundente: “Te amo”.
La mudanza a Turquía, que incluye ya la convivencia plena y confirmada, implica algo más que un cambio de país: es una apuesta a fondo por el romance con la expareja de Wanda Nara, lejos de Argentina, en medio de idas, vueltas y la presión de la exposición constante. Además, todo indica que el delantero renovaría su contrato con el club turco, por lo que permanecerían más tiempo en la lujosa propiedad a la que se mudaron en el barrio de Beşikta.
En Intrusos (América), Adrián Pallares lo destacó con claridad: “Sabemos que Suárez se va a radicar en Turquía finalmente con el deportista, quien renovaría su contrato por dos años más, con lo cual ahí el cambio familiar es muy grande porque ella tiene dos hijos pequeños. Otra cosa también que hemos dejado pasar de largo es que Icardi, Dios sabe cuándo volverá a ver a sus hijas que están acá”.
El movimiento familiar se siente especialmente en los viajes y logísticas. Rodrigo Lussich sumó: “La información de Rufina es que la nena ya hizo la adaptación y que volvería con el padre”. Es decir, ella emprendió el regreso al país junto con sus hermanos y la madre de la actriz. Magnolia y Amancio pasarán unos días con su papá, Benjamín Vicuña; Rufina, con Nicolás Cabré.
Paula Varela aportó más detalles: “Rufina extrañaba un poco y dijo que ya que iba a volver a principios de septiembre, cuando arranca efectivamente el colegio allá en Turquía. Quería venir y aprovechar estos días de nuevo en Argentina para ver a la gente que quiere, para estar con su papá y con sus amigos porque después durante un tiempo más largo no va a poder viajar”.
Sobre el futuro inmediato, Karina Iavícoli sumó una posibilidad: “Lo que a mí me contaron es que hubo un cambio de planes y que Rufina estaría volviendo a Argentina, porque existe la posibilidad, y lo pongo como una posibilidad, que cuando ella retorne a Turquía sea en compañía de su papá, de Cabré. Como está la invitación que hicieron la China y Mauro en su momento, existe la posibilidad de que la niña retorne a Turquía junto con su padre“.
Por su parte, Pablo Layus señaló: “En su momento, cuando le pregunté a Cabré con respecto a la posibilidad de que viaje a Turquía, después de que se dijo de que iba a tener una habitación especial, algo así como una casa adentro de otra. Me dijeron que era muy difícil porque Nicolás, más allá de los compromisos laborales, tiene agendadas un par de carreras para correr y no hay ninguna en Turquía. Al contrario, hay otros destinos”.
Mientras tanto, la vida en Estambul va cobrando forma real; Iavícoli ofreció información exclusiva sobre el nuevo hogar: “Tenemos en exclusiva dónde van a vivir porque entre hoy y mañana están haciendo la mudanza a esta súper mansión. Ya habíamos adelantado que es muy cerca del Bósforo. El barrio se llama Beşiktaş. Es un lugar increíble. Tiene toda la mezcla de la parte europea de Turquía con toda la modernidad“.
El proceso de instalarse no es menor: “Eugenia está comprando los muebles. Me contó gente muy cercana que estos son los pasos que ellos van dando, porque es una casa que la van a poner como nueva, con todas las comodidades y es un lugar realmente hermoso donde le va a permitir también a ella moverse sola si quiere”, relataron desde el entorno.