Aunque las mujeres constituyen más de la mitad del estudiantado universitario en el Perú, su participación en los cargos docentes y de decisión sigue siendo significativamente menor. Esta paradoja fue el eje de la conferencia magistral de la Dra. María Mestre Escrivá, rectora de la Universidad de Valencia (España), durante el III Encuentro Iberoamericano de Líderes Universitarios, celebrado en el campus Trujillo de la Universidad César Vallejo (UCV).
Según cifras oficiales del Sistema de Información Universitaria, hasta el periodo académico 2024-II, las mujeres representan el 51.2 % del total de estudiantes universitarios en Perú, es decir, 694,693 alumnas matriculadas. Sin embargo, solo el 36.6 % del total de docentes universitarios son mujeres hasta marzo de 2025.
“Las mujeres en las universidades somos más, pero menos en los puestos de responsabilidad”, subrayó la Dra. Mestre durante su exposición titulada “Liderazgo femenino en la educación superior: ¿qué aportamos las mujeres?”.
La académica española explicó que esta brecha no es exclusiva del Perú. En España, casi el 60 % de los egresados y más del 50 % de los doctores son mujeres, pero solo el 25 % de las cátedras universitarias —el cargo más alto en la carrera docente— están ocupadas por ellas. Esta realidad, afirmó, “no responde a una falta de mérito o voluntad de las mujeres, sino a estructuras universitarias obsoletas”.
Para Mestre, el sistema académico actual no reconoce el ciclo vital femenino. “El progreso en la carrera académica se produce en un momento que forma parte del ciclo vital de la mujer. Forma parte de una edad en que las mujeres tomamos decisiones; una de ellas es si optamos por la maternidad y la crianza de los hijos. Esto frena la carrera universitaria y retrasa nuestra presencia en el gobierno universitario”, puntualizó.
La rectora fue enfática al afirmar que el acceso de las mujeres a cargos de poder continúa siendo “una cultura de la excepción”. “Esta excepción se manifiesta cuando una mujer alcanza ese nivel de responsabilidad: es un hecho noticiable, no una práctica común”, añadió.
Asimismo, advirtió que, a pesar de su estructura democrática, las universidades reproducen prácticas de poder muy masculinizadas, lo cual desincentiva a las mujeres a postular o sentirse parte de esos espacios.
Valor del liderazgo femenino
En contraste, defendió que la presencia femenina en cargos de dirección universitaria no solo responde a un principio de equidad, sino que aporta una transformación sustancial en la gobernanza institucional. Entre los aportes mencionados, destacó:
- Un liderazgo horizontal y participativo
- Alta preparación académica y compromiso institucional
- Diversificación de la agenda universitaria
- Mejora de la calidad institucional
- Una necesaria renovación cultural
“Las mujeres aportamos cualidades distintas al gobierno institucional”, insistió Mestre ante más de 500 autoridades académicas reunidas en el evento internacional.
La Universidad César Vallejo, anfitriona del encuentro, reafirmó su compromiso con la innovación educativa, el debate de ideas y la transformación estructural que requiere la educación superior en Iberoamérica. Como parte de su mensaje institucional, lanzó un llamado a construir una “universidad con propósito” e invitó a postular al próximo examen de admisión el 20 de julio.
“Si crees en una educación inclusiva, transformadora y con oportunidades para todos, conviértete en el líder o lideresa que el Perú y el mundo necesitan. Tu futuro empieza hoy”, indicó la universidad en su mensaje final.