La escena doméstica puede convertirse en escenario de señales sugestivas, y esto es lo que ocurre entre Wanda Nara y Mauro Icardi, quienes no pueden ponerle un punto final a su relación más allá del conflictivo divorcio y las peleas contantes.

En esta oportunidad, Wanda expuso una situación de la vida cotidiana, desde su casa de campo, en las afueras de Milán. Según advirtió Pochi de Gossipeame en su cuenta de Instagram, la empresaria compartió fotos donde se observaba una bandeja repleta de mates y hubo uno que llamó la atención. En el borde de plata se leían los nombres de ambos grabados sobre el metal: “Wanda y Mauro”. Ese objeto, lejos de quedar relegado a un costado, ocupaba un lugar central en la imagen, sobre una mesa de madera, junto a otros artículos cotidianos. La presencia visible de ese objeto, en pleno proceso de divorcio, avivó la interpretación de que Wanda todavía marca el terreno alrededor del vínculo y del pasado compartido con Icardi.

El gesto de Wanda Nara hacia Mauro Icardi: un mate que despertó las alertas (Instagram)

La inclusión de ese objeto en el encuadre principal parece todo menos casual. Para muchos, funciona como un recordatorio sutil de la historia que los unió, y que sigue teniendo lugar tanto en la intimidad como ante la mirada de todos. En el contexto de una pareja famosa, donde toda decisión gana eco mediático, la elección de mantener visible ese mate puede entenderse como una forma de posicionar recuerdos y pertenencias en el espacio común que fue alguna vez compartido. Incluso, puede ser interpretado como un mensaje a la China Suárez, dando cuenta de que las vivencias con el futbolista aun permanecen vivas y latentes.

El detalle no solo pasó inadvertido para quienes siguen el día a día de la mediática, sino que también reavivó especulaciones en torno a la persistencia de gestos simbólicos y la dificultad de desatar completamente los lazos, incluso cuando el divorcio ya es tema judicial y de agenda pública.

El mensaje de Mauro Icardi con una foto de la China Suárez en el momento en que Wanda Nara arribó a Buenos Aires (Instagram)

Por el lado de Mauro Icardi, la respuesta llegó en forma de una publicación sugerente y cargada de sentido. Coincidiendo con la llegada de Wanda al país este domingo por la mañana, el delantero del Galatasaray decidió compartir una foto de la China Suárez riéndose bajo el sol porteño. La imagen estuvo acompañada por la frase “Mis buenos días”, una expresión que muchos leyeron como un dardo dirigido a su exmujer y una declaración sobre dónde se ubica su presente emocional.

La publicación de Icardi contrastó la complicidad de la imagen con la actriz y su momento actual con la situación de distanciamiento que atraviesa con la madre de sus hijas. Para los seguidores, la referencia a la China Suárez―figura clave en la historia de desencuentros previos entre los protagonistas―resultó imposible de separar del enfrentamiento mediático y emocional en curso.

Este tipo de mensajes embeben la narrativa diaria de indirectas y gestos interpretados, acentuando la tensión y demostrando que el ida y vuelta alcanza a todos los involucrados, incluso a quienes formaron parte de capítulos anteriores de la pareja.

Días antes, la situación se había puesto al límite cuando la justicia argentina le concedió a Mauro Icardi la posibilidad de reencontrarse con sus hijas. La medida establecía que ese viernes el futbolista podía recoger a sus pequeñas directamente en el colegio y pasar la tarde con ellas. Icardi, que asistía a un acto escolar de las niñas sin saber sobre la inminente entrega, recibió la noticia en el mismo establecimiento. Para entonces, la China Suárez se encontraba esperándolo en el auto, un detalle que pronto desencadenaría el conflicto.

“Cuando se encontraba en esa situación, la directora de la institución le comunica la resolución. Las nenas no iban a ver a la China, porque terminaba el acto y Mauro se volvía a la casa de los sueños con la novia. Pero estando en el acto, que es la defensa que él dice, le avisan lo de la resolución, entonces él se queda esperando que termine todo y se lleva a Isabella. En el auto no tenía que haber nadie”, relató Yanina Latorre en Sálvese quien pueda (América). Sin embargo, cuando Isabella subió al vehículo, se encontró con la modelo y uno de los hijos de Icardi. La niña mostró incomodidad por la situación, llegó llorando a su casa y la molestia creció con el correr de las horas, según relató la conductora.

Wanda Nara no permaneció en silencio después de conocer los detalles del encuentro y la participación de la China Suárez. Su reacción llegó a través de Instagram, canal habitual de sus comunicaciones públicas, donde lanzó un fuerte mensaje contra la actriz. “Otra revinculación que esta zorra arruina. Cada lágrima de mis hijas las vas a pagar. Después de dos meses logramos que el papá pueda ver a sus hijas, ¿y vas al colegio? Y hacés que mi hija más chiquita no pueda merendar con su papá. Mala persona”, disparó la mediática desde sus historias.

El fuerte mensaje que escribió Wanda Nara contra la China Suárez el día en que Mauro Icardi debía reencontrarse con sus hijas (Instagram)

Según el testimonio de Yanina Latorre, Wanda había propuesto que el lugar del encuentro fuera su propia casa, consciente de la exposición que supone cada reencuentro y con la intención de mantener la situación lo más privada posible: “Wanda, en un muy buen acto, le ofrece que el lugar de encuentro sea su casa, ya que ella está en Europa, y no iba a pasar nada. Y además que él tiene una orden de restricción contra Wanda, no sobre la casa. Así ella ofrece el lugar, para que el encuentro sea ahí, sin fotos, sin público y sin exposición”.

El desenlace, lejos de aportar calma, profundizó las diferencias entre las partes, mientras cada nuevo episodio encuentra eco no solo en los medios sino también en la sensibilidad de quienes se ven impactados de lleno en la intimidad familiar.