Patrullas de la guardia costera ucraniana navegan en el mar Negro en febrero de 2024 (REUTERS/Thomas Peter/Archivo)

La Unión Europea (UE) ha decidido intensificar su presencia en la región del Mar Negro mediante la creación de un “centro de seguridad marítima” para contrarrestar la influencia de Rusia a través de una colaboración más estrecha con países como Ucrania, Moldavia, Georgia, Turquía, Azerbaiyán y Armenia.

El Mar Negro, que limita con siete países, es un punto estratégico que ha cobrado relevancia desde la invasión rusa a Ucrania en 2022. Este cuerpo de agua no solo ha sido escenario de combates, sino también de bloqueos rusos a las exportaciones de grano ucraniano, vitales para la seguridad alimentaria mundial.

En declaraciones a la prensa en Bruselas, Kaja Kallas, jefa de asuntos exteriores de la UE, destacó este miércoles la importancia de mejorar la seguridad en la región, especialmente ante las amenazas a infraestructuras submarinas críticas, como los cables de internet y comunicaciones, y el uso de flotas “fantasma” que permiten a Rusia eludir sanciones sobre sus exportaciones de petróleo.

El plan de la UE incluye el establecimiento de un centro de seguridad marítima que mejorará la “conciencia situacional y el intercambio de información” en el Mar Negro. Este centro permitirá el monitoreo en tiempo real desde el espacio hasta el lecho marino y proporcionará alertas tempranas sobre posibles amenazas y actividades maliciosas. Además, podría desempeñar un papel en la supervisión de un posible futuro alto el fuego entre Rusia y Ucrania.

Otro objetivo es fortalecer la infraestructura de transporte regional para mejorar la movilidad militar, asegurando que tropas y equipos puedan desplegarse rápidamente donde sean necesarios.

La alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Kaja Kallas, este miércoles en Bruselas (EFE/EPA/OLIVIER HOSLET)

Sin embargo, aún no se han definido detalles cruciales como la ubicación del centro, los países que participarán y los recursos financieros que se destinarán. Aunque la mayoría de los países del Mar Negro, excepto Rusia, mantienen relaciones cooperativas con la UE, sus alineaciones con la agenda del bloque varían. Ucrania y Moldavia buscan unirse a la UE, mientras que las candidaturas de Georgia y Turquía están actualmente congeladas. Armenia se ha acercado a la UE en los últimos años, mientras que Azerbaiyán mantiene una relación compleja tanto con Rusia como con la UE.

Turquía, miembro de la OTAN y socio cercano de la UE, también tiene sus propios intereses en la región. Según Stefan Meister, del Consejo Alemán de Relaciones Exteriores, Ankara equilibra sus obligaciones con la OTAN sin provocar a Moscú. Aunque Turquía ve a Rusia como una amenaza de seguridad y apoya a Ucrania, también se beneficia de las sanciones occidentales y del comercio con ambos países.

El interés de la UE en el Mar Negro se intensificó tras la adhesión de Bulgaria y Rumania al bloque en 2007. China también ha incrementado su presencia en la región, como lo demuestra la adjudicación a un conglomerado chino del proyecto para construir un puerto de aguas profundas en Anaklia, Georgia. Tinatin Akhvlediani, del Centro de Estudios de Política Europea, señaló que no profundizar los lazos en esta región podría tener un costo real para la seguridad y el peso económico de Europa.

El Mar Negro se ha convertido en un eje central para la seguridad europea y la conectividad con regiones como el Cáucaso del Sur, el Mar Caspio, Asia Central y el Medio Oriente. Meister considera positivo que la UE busque un papel más activo en la seguridad del Mar Negro mediante un centro de monitoreo, aunque subraya la falta de claridad sobre la participación, financiación y recursos para este nuevo centro de seguridad. La Comisión Europea ha anunciado que el próximo paso será reunir a ministros de los estados miembros de la UE y de los países del Mar Negro para discutir cómo avanzar con la propuesta.