En un pronunciamiento oficial realizado el jueves 17 de abril, ONU Derechos Humanos Colombia rechazó los tres atentados indiscriminados ocurridos en las últimas 24 horas en el departamento del Cauca, que afectaron gravemente a la población civil, dejando al menos dos personas muertas, varias heridas y causando una considerable cantidad de daños materiales en viviendas y bienes civiles.
El primer ataque ocurrió en la vía Panamericana, a la altura del corregimiento de Mondomo, en el municipio de Santander de Quilichao, donde se registró una explosión que causó la muerte de una persona, dejó a varias personas heridas y generó pánico en la comunidad.
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Según el informe de la ONU, los daños materiales fueron significativos, afectando no solo a los vehículos que transitaban por la carretera, sino también a las viviendas cercanas, lo que sumó un alto nivel de temor entre los residentes de la zona.
Horas antes, el miércoles 16 de abril, se habían registrado dos atentados adicionales en Santander de Quilichao, también en el Cauca. Uno de estos ataques cobró la vida de un contratista de la Compañía Eléctrica de Occidente y dejó a dos personas heridas. Como en el caso de Mondomo, se reportaron daños materiales a bienes civiles.
A través de su comunicado, la ONU hizo un llamado urgente a todos los actores armados no estatales a que respeten los estándares internacionales de derechos humanos y el Derecho Internacional Humanitario (DIH).
En particular, instaron a evitar realizar atentados indiscriminados que puedan afectar tanto a las personas como a los bienes civiles, subrayando la gravedad de estos actos violentos que afectan a la población civil.
La organización también expresó su solidaridad con las víctimas y sus familias, así como con la comunidad del Cauca, que vive un contexto de creciente inseguridad.
“Nos solidarizamos con las víctimas, y la población civil del departamento del Cauca. Llamamos a las autoridades a investigar, juzgar y sancionar a los responsables de estos atentados indiscriminados”, destacó ONU Derechos Humanos Colombia en su comunicado.
El ministro de Defensa responsabilizó a disidencias Farc y lanza ofensiva judicial
El ministro de Defensa Pedro Sánchez se pronunció de inmediato, señalando como responsables del atentado a integrantes de la estructura Jaime Martínez de las disidencias de las Farc, liderada por alias Marlon.
“Terroristas de las disidencias de las Farc habrían asesinado, por lo menos, a una mujer y herido gravemente a otros civiles más en plena Semana Santa”, afirmó el ministro en su cuenta oficial de X, condenando enérgicamente los hechos.
Sánchez agregó que “estos actos demuestran que su esencia es el narcotráfico y el terrorismo”, recordando que estas estructuras le dijeron NO a la paz en 2016 y volvieron a rechazar los esfuerzos de diálogo dentro del marco de la política de Paz Total.
Puso una recompensa de 300 millones de pesos para quién de información de los responsables
Como parte de la respuesta institucional, el ministro anunció una recompensa de hasta 300 millones de pesos por información que permita identificar y capturar a los responsables del atentado.
“Una información puede salvar vidas, incluso la suya. Marque 107 o 314 358 7212. Absoluta reserva”, señaló, llamando a los ciudadanos a colaborar con las autoridades para evitar nuevos atentados.
Además, mencionó que el cabecilla alias Marlon, presuntamente habría transmitido una enfermedad venérea a menores, en lo que calificó como un ejemplo del nivel de descomposición y brutalidad de estos grupos.
Narcotráfico, crimen y transformación del territorio
En un mensaje complementario, Sánchez conectó el atentado con la economía ilegal: “Donde hay narcotráfico hay crimen. Quienes creen que cultivar coca es un medio para subsistir, deben reconocer que alimentan al verdugo que tarde o temprano los asesinará”, escribió.
El ministro también destacó el trabajo de las Fuerzas Militares, la Policía Nacional y los programas del Gobierno Nacional para desmantelar estas estructuras armadas, incluyendo la sustitución de cultivos ilícitos y oportunidades educativas para las comunidades.