El mundo de la literatura, y en especial el de la literatura peruana, se ha visto sumido en el dolor tras el fallecimiento de Mario Vargas Llosa el pasado 13 de abril de 2025. En su despedida, una de las voces más cercanas al escritor, su nieta Josefina Vargas Llosa, ha compartido una emotiva carta en redes sociales que ha conmovido a miles.
En la misiva, la joven relata no solo el sufrimiento que Mario enfrentó durante sus últimos años, sino también el profundo amor y gratitud que ella siente por haberlo tenido en su vida.
“Con el corazón roto y la tristeza más profunda que he sentido en mi vida, te escribo estas palabras”, inicia la carta de Josefina, quien recuerda a su abuelo como un ser querido y cercano: “Antes que nada, quiero agradecerte porque fuiste mucho más que mi abuelo: un segundo papá que me regaló la vida y me acompañó durante treinta años”.
A lo largo de la carta, Josefina rememora con nostalgia los momentos compartidos, como las carcajadas y las historias de su abuelo, o las conversaciones que ambos mantenían mientras disfrutaban de huevos rotos en un conocido restaurante español, un lugar emblemático para ambos.
“Siempre me harán falta tus carcajadas, todas tus historias y nuestras conversaciones comiendo huevos rotos en Casa Lucio”, compartió, evidenciando lo importante que fue Mario Vargas Llosa en su vida, no solo como escritor, sino como un ser humano lleno de sabiduría y amor.
Además, la joven expresa su tristeza por el hecho de que Mario Vargas Llosa no conocerá a sus hijos, pero promete que su legado vivirá a través de ellos: “Me entristece pensar que no podré tener momentos así otra vez y que no conocerás a mis hijos, pero ellos crecerán sabiendo que su bisabuelo fue un genio absoluto”.
La nieta también muestra su gratitud hacia la esposa de Mario Vargas Llosa, Patricia Llosa, quien compartió con él más de 60 años de vida, reconociendo su esfuerzo y dedicación: “Cumpliste todos tus sueños y recibiste innumerables premios y distinciones”.
En una de las partes más conmovedoras de la carta, Josefina rememora la lucha silenciosa de su abuelo contra una enfermedad incurable, que fue una de las causas de su fallecimiento. “Sé que la vida nunca volverá a ser igual sin ti. Siempre habrá un hueco en mi corazón, y estoy agradecida por ello. Será un recordatorio constante del amor y la gratitud que siento”, expresó.
Sin embargo, la joven también deja claro que la memoria de Mario Vargas Llosa perdurará y que su legado continuará siendo una fuente de inspiración para futuras generaciones. “Me consuela saber que las leyendas nunca mueren”, compartió, mostrando su consuelo en el hecho de que su abuelo será siempre recordado por sus palabras y su impacto en el mundo.
Para concluir, Josefina se despide de su abuelo con una promesa: “Gracias por luchar tantos años con tanta valentía contra tu enfermedad para darnos más tiempo contigo. Te lo prometo. Siempre ha sido, es y será el privilegio y orgullo de mi vida ser tu nieta. Hasta que nos volvamos a encontrar”.
La carta de Josefina Vargas Llosa no solo refleja el dolor por la partida de su abuelo, sino también el amor incondicional que los unió durante su vida. En ella se expresa también la admiración por su legado literario, un legado que no solo vivirá en sus libros, sino en los corazones de aquellos que lo conocieron y lo admiraron, como su nieta, que seguirá llevando su memoria con ella.