El domingo pasado, las redes sociales se llenaron de homenajes y recuerdos por el Día del Padre, y los famosos se sumaron compartiendo mensajes y postales familiares. Entre las publicaciones que más repercusiones generaron estuvo la de Daniel Osvaldo, quien eligió mostrar una imagen junto a sus cuatro hijos, fruto de diferentes relaciones, en una aparente escena de unión y afecto. Sin embargo, detrás de esa foto compartida ante la mirada pública, surgieron fuertes cuestionamientos desde su entorno más cercano, dejando al descubierto una situación muy adversa. A menos de un día del posteo, la madre de su hijo mayor, Ana Oertlinger, se encargó de responder y no ocultó su indignación.

 Las palabras de Ana se difundieron durante la emisión de Intrusos (América) de este lunes, donde detalló los motivos de su enojo y cuestionó duramente la actitud del exfutbolista. “El nivel de cinismo… Me dejaste helada. Esa foto es de al menos dos años atrás. Qué tipo enfermo. No sé qué decirte, van ocho meses que no pasa un peso de la cuota alimentaria y, del otro tema, no hablemos…”, sostuvo con evidente molestia en referencia al mensaje público de Osvaldo.

La crítica fue más allá de lo económico: Oertlinger hizo hincapié en el vínculo roto entre padre e hijo y la vigencia de una medida legal. “Lógicamente, sigue la perimetral y con mi hijo no habla desde la madrugada del 13 de enero. Es muy caradura, en esa foto se autosaluda, pobre”, remarcó, dando cuenta de la distancia profunda entre ambos, pese a lo que pudo sugerir la publicación del exjugador.

La foto de Daniel Osvaldo con sus cuatro hijos que desató la furia de su expareja (Instagram)

El trasfondo de esta disputa se remonta a un grave episodio ocurrido durante el cumpleaños número 39 de Osvaldo, el pasado 13 de enero. Aquella madrugada, según relató Ana en una entrevista al ciclo A la Tarde (América), una feroz discusión entre el exfutbolista y Gianluca, su hijo de 18 años, terminó en una situación de violencia física que selló la ruptura definitiva entre ambos. La relación, ya tensa y erosionada por años de desencuentros, llegó a un límite tras el incidente que motivó la denuncia y la intervención de la justicia.

Según el testimonio de su expareja, la agresión comenzó con intercambios verbales y escaló rápidamente a golpes: “Le empieza a gritar, lo pone contra una pared y ahí le pega golpes de puño en la cabeza, en las costillas y en el brazo”. La madre de Gianluca subrayó el uso de la fuerza de Osvaldo y reveló que el exfutbolista atacó específicamente el costado izquierdo del cuerpo del joven, considerando que es diestro. El adolescente intentó evadir a su padre y refugiarse en otro ambiente de la casa, pero fue perseguido, de acuerdo a la denuncia, y nuevamente agredido mientras lloraba en un sillón. Osvaldo, según contó Oertlinger, sirviéndose un Fernet, lo ridiculizó diciendo: “¿Ahora te haces la víctima? ¿Ahora lloras?” y luego le propinó una mordida en la oreja izquierda, dejando una marca como evidencia del episodio.

A partir de ese día, el hijo decidió cortar toda relación con su padre y Oertlinger acudió a la justicia. La gravedad de los hechos motivó que un juez dictara una orden de restricción perimetral, la cual prohíbe a Osvaldo acercarse a menos de 500 metros de Gianluca e incluso realizar cualquier intento de contacto, ya sea personal o a través de las redes sociales. En sus declaraciones a los medios, Ana manifestó su temor por la eventual manipulación de su ex y advirtió: “Es muy manipulador”, en referencia a su influencia sobre el joven hasta la ruptura.

El exdeportista junto a sus hijos Gianluca y Momo (Instagram)

Además del conflicto judicial, la expareja del músico denunció el incumplimiento sistemático de las obligaciones económicas para con su hijo. Según sus declaraciones, el exfutbolista dejó de aportar el monto completo de la cuota alimentaria hace meses: “Primero empezó a pasar la mitad, y a partir de diciembre no ha dado nada”, afirmó. Por si fuera poco, Gianluca también perdió la cobertura de obra social, por lo que su madre inició un reclamo ante la justicia para garantizar los servicios necesarios.