(Imagen Ilustrativa Infobae)

Existe una fruta que destaca por su sabor intenso, pero también aporta beneficios para la salud del corazón. Se trata de la maracuya, la llamada fruta de la pasión. Comerla con frecuencia puede ayudar a mantener la presión arterial en niveles adecuados y reducir el riesgo de enfermedades cardíacas.

Lo que hace especial a esta fruta es su alto contenido de potasio, un mineral que ayuda a eliminar el exceso de sodio del cuerpo. El sodio, presente en muchos alimentos procesados, es uno de los principales responsables de la hipertensión.

Cuando hay demasiado, el corazón trabaja más y eso puede traer problemas. El potasio, en cambio, ayuda a relajar los vasos sanguíneos y mejora la circulación.

Beneficios de la maracuya

Una porción de maracuyá contiene alrededor de 348 miligramos de potasio, lo cual es una buena cantidad para ayudar al cuerpo a mantener ese equilibrio entre sodio y potasio.

Este equilibrio “alivia la tensión en las paredes de los vasos sanguíneos”, lo que ayuda a mantener una presión arterial saludable.

Además del potasio, la maracuyá ofrece otros beneficios. Tiene fibra, que mejora la digestión y ayuda a regular los niveles de colesterol. También es rica en vitamina C y antioxidantes, los cuales ayudan a proteger las células del cuerpo y a prevenir inflamaciones, algo que también puede afectar al corazón.

Más allá de su consumo directo, el maracuyá puede incorporarse en jugos, mermeladas y té, y sus hojas se utilizan para preparar infusiones relajantes que ayudan a combatir el estrés y el insomnio. (Andina)

Fácil de incluir esta fruta en la dieta

Una de las grandes ventajas de la maracuyá es lo fácil que es incluirla en la dieta. Se puede comer sola, mezclar con yogur, agregar a licuados, ensaladas o postres. Su sabor único y refrescante la convierte en una opción deliciosa y saludable.

También es una fruta que no eleva mucho el nivel de azúcar en sangre, lo que la hace ideal para personas con diabetes o que buscan cuidar su alimentación sin dejar de disfrutar lo que comen.

Hoy en día, muchas personas sufren de presión alta sin saberlo. Por eso, hacer pequeños cambios en la alimentación puede marcar una gran diferencia. Incluir maracuyá en la rutina diaria es una forma simple y natural de cuidar el corazón.

No es necesario gastar mucho ni seguir dietas complicadas. Solo basta con sumar frutas como la maracuyá a los alimentos de todos los días.

En resumen, la maracuyá no solo es rica, también es una gran aliada para mantener una buena salud. Ayuda al corazón, mejora la presión arterial y aporta vitaminas y minerales esenciales para el cuerpo.

El maracuyá, fruta tropical de propiedades sedantes y antioxidantes, se destaca por su capacidad para prevenir la diabetes, bajar de peso y proteger el corazón con su riqueza en nutrientes esenciales. (Andina)