El ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, y el asesor presidencial de Nicaragua, Laureano Ortega, se dan la mano antes de su reunión en la Residencia de Huéspedes Estatal Diaoyutai en Beijing, China, el 12 de mayo de 2025 (REUTERS/Florence Lo/Pool)

La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo propuso este miércoles exonerar de impuestos fiscales y aduaneros a las empresas chinas que inviertan en las zonas económicas especiales que se crearán en el país en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta.

Esa propuesta está establecida en una iniciativa de Ley de Creación de Zonas Económicas Especiales de la Franja y la Ruta, presentada por Ortega y Murillo y enviada a la Asamblea Nacional (Parlamento), controlado por la dictadura sandinista.

La iniciativa ofrecerá beneficios fiscales y aduaneros a las empresas que operen en Zonas Económicas Especiales de la Franja y La Ruta, como la exoneración del 100 % de todas sus actividades económicas, según el texto.

La iniciativa propone la exención del 100 % del pago de Impuesto sobre la Renta de Actividades Económicas (IR) durante 10 años, renovables cada 10 años de forma indefinida.

También la exención del 100 % del pago de Impuesto sobre los dividendos obtenidos de la actividad económica durante 10 años, renovables cada 10 años de forma indefinida.

Además, la exención de impuestos y tasas a extranjeros no residentes en concepto de: intereses sobre préstamos, comisiones, honorarios y pagos por servicios legales en el exterior o en Nicaragua.

Asimismo, la exención de todos los impuestos, derechos de aduana y de consumo, asociados con las importaciones de bienes y servicios destinados a su operación; así como la exención de Impuesto al Valor Agregado (IVA) a compras locales e importaciones de bienes y servicios.

Otros beneficios serán la exención total de impuestos indirectos, de venta o selectivos de consumo; exención total de impuesto a la trasmisión de bienes muebles e inmuebles; y la exención total de impuestos municipales.

Mina china en Nicaragua (Fuente)

La iniciativa establece que serán beneficiados con esos incentivos “las personas jurídicas, públicas, privadas, mixtas, nacionales o extranjeras que operen las Zonas Económicas Especiales de la Franja y la Ruta en los sectores como industria manufacturera, agroindustria, tecnología, servicios de valor agregado que facilitan el desarrollo nacional”.

El 1 de agosto de 2024, Nicaragua y China inauguraron una ruta marítima comercial directa en el marco de la iniciativa de la Franja y la Ruta, con el fin de aprovechar los beneficios del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre ambos países.

El TLC entre el gigante asiático y el país centroamericano, firmado el 31 de agosto de 2023, comenzó a regir el 1 de enero de 2024, dando acceso inmediato a ese mercado al 71 % de los productos que actualmente exporta Nicaragua con un arancel del 0 %, como la carne bovina, oro en bruto, azúcar, mariscos, miel, ron, chocolate, arneses y textiles, entre otros.

Nicaragua espera que China se convierta en uno de los principales proveedores de materias primas, insumos, bienes de capital, bienes de consumo, maquinaria, equipo, entre otros, y en un comprador de las exportaciones agropecuarias nicaragüenses y que invierta en la instalación de empresas en zonas francas.

El pasado jueves, el régimen de Ortega y Murillo otorgó tres nuevas concesiones mineras a cielo abierto —dos a empresas chinas y una a una firma local— que abarcan más de 55.000 hectáreas en los departamentos de Matagalpa, Madriz y Chontales. Con esta decisión, el sandinismo consolida su estrecha alianza económica con China, a la que ha entregado más de 700.000 hectáreas para explotación minera en los últimos dos años.

(Con información de EFE)