Este miércoles 6 de agosto comienza una nueva etapa en la vida de Julieta Prandi. Después de años del calvario que vivió en manos de su exmarido Claudio Contardi, empieza el juicio por violación contra el empresario gastronómico, con quien la modelo tiene dos hijos.

Horas antes de presentarse en el Tribunal N° 2 de Campana, el abogado Fernando Burlando, cuyo equipo representa a Prandi, se expresó en sus redes sociales. “Este juicio nos da la oportunidad de hacer algo más que Justicia en un caso puntual, horroroso, digno de un guion de perversidades inimaginables contra una mujer indefensa”, escribió en una extensa nota en sus historias de Instagram.

El defensor de la modelo remarcó la magnitud del proceso judicial al que se enfrenta Claudio Contardi, señalado por su expareja como responsable de reiterados abusos sexuales y una extensa situación de manipulación, violencia física, psicológica y amenazas.

Durante su escrito, Burlando sostuvo: “Al cabo de estas audiencias tendremos la oportunidad de pararnos ante un antes y un después en materia de violencias de género y de abusos”. El abogado fue enfático al describir el alcance del sufrimiento de Prandi: “Julieta ha padecido mucho más que eso porque en su padecer ha dejado jirones de su salud mental”. Según su mirada, el proceso judicial trasciende lo individual para convertirse en alerta y lección colectiva: “No estamos aquí para detenernos en la mecánica de una violación ni en el derrotero de una mujer abusada, sino en la exhibición del calvario que espera a una víctima antes, durante y después del sometimiento”.

El mensaje de Fernando Burlando horas antes de que comience el juicio por violación contra Claudio Contardi, exmarido de Julieta Prandi (Instagram)

Burlando enumeró fragmentos de los informes periciales oficiales que grafican el pánico de Prandi ante cada llegada de Contardi a su casa. “La violencia psicológica, el mensaje perverso de ‘sos un pedazo de carne a mi servicio’ resulta poco comparado con el sufrimiento y la angustia de ni siquiera encontrar algo de paz en el sueño. Porque Julieta tenía terror de dormirse porque sabía que en ese estado iba a ser más fácilmente atacada”. Burlando pidió a la Justicia “observar con celeridad y eficiencia” el caso para evitar nuevos sufrimientos derivados de procesos judiciales extensos.

El juicio desarrollado en los tribunales de Campana tiene como acusado a Contardi por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado. El proceso se abrió formalmente tras la denuncia de la conductora en octubre de 2021 y la elevación a juicio solicitada por el fiscal Christian Fabio, exactamente un año después. El tribunal escuchará a catorce testigos, comenzando con Prandi, quien será la primera en declarar y cuya palabra resultó esencial para llevar el caso a la instancia actual.

Fernando Burlando, lawyer for Dalma and Gianinna Maradona, daughters of soccer legend Diego Maradona, talks to the press as he arrives at the San Isidro court ahead of the trial for the death of Diego Maradona, in San Isidro, on the outskirts of Buenos Aires, Argentina May 13, 2025. REUTERS/Francisco Loureiro

Prandi se presenta como querellante y describe una secuencia de hechos que, según consta en su denuncia, incluyó abuso sexual, amenazas reiteradas y violencia extrema durante casi tres años. “Él me secuestró, me violó y me amenazó de muerte”, afirmó en su exposición. La modelo detalló presuntas agresiones físicas, el sometimiento mientras dormía y un patrón de amedrentamiento permanente, con violencia creciente desde el embarazo de su segundo hijo en adelante. Narró cómo Contardi controlaba todas sus actividades, la aislaba progresivamente de familia y amigos, limitaba sus traslados, y hasta la hacía cambiar el número de teléfono para restringir su contacto con el exterior.

Según los documentos de la causa, la violencia adoptó distintos matices: amenazas contra la vida de Prandi y sus allegados, insultos y una permanente intimidación psicológica. La distancia con sus familiares se profundizó al punto de que los padres de la modelo conocieron a su nieto recién cuando el niño cumplió cuatro años. Contardi, de acuerdo al expediente, utilizó elementos de la religión umbanda para manipular a Prandi y exigirle control total sobre sus actos cotidianos. El hostigamiento llegó a provocar severas consecuencias en la salud física de la modelo, quien manifestó trastornos médicos reiterados y episodios de angustia severa.

El proceso cuenta con la intervención de peritos designados por la Procuración bonaerense, cuya evaluación psicológica resultó determinante en la causa. “Surgen indicadores compatibles con victimización sexual y violencia familiar”, concluye el informe oficial elaborado por una especialista, quien subrayó que la víctima no incurrió en falsedades durante su narración. Este punto constituye un factor clave al momento de ponderar la credibilidad del testimonio y el posterior avance de las actuaciones penales.

Claudio Contardi enfrenta el juicio bajo una calificación por abuso sexual agravado, con hechos reiterados y daño grave a la salud mental de Prandi. Actualmente, rige sobre él una restricción de acercamiento de 300 metros respecto a su expareja. Durante el proceso, Contardi optó por desistir de un jurado popular en favor de un tribunal técnico y realizó dos presentaciones en las que negó los cargos. El desarrollo de las audiencias, la respuesta judicial y el testimonio de los especialistas establecen un punto de inflexión para la Justicia y el abordaje de la violencia de género en la Argentina, tal como reclamó Burlando.