La China Suárez se animó a dar una entrevista en vivo desde Turquía y se enfrentó a los conductores y panelistas de Puro Show (El Trece). Tras hablar acerca del estreno de su nueva serie, Hija de fuego la venganza de la bastarda, decidió meterse en la polémica que últimamente la tiene como protagonista a causa de su relación con Mauro Icardi y su pelea con Wanda Nara. En la entrevista aseguró que nunca fue amiga de Wanda por lo que todo lo que sucedió en octubre de 2021 no habría significado el final de una amistad.
La última gran polémica comenzó con un bolso Louis Vuitton, regalo que le hizo Icardi días después del cumpleaños de su hija mayor. El bolso, una edición limitada de un clásico de la marca francesa, destacó un nuevo capítulo en la guerra entre las mujeres, en el cual Wanda subió una serie de posteos en sus historias apuntando contra el padre de sus hijas y su nueva pareja, contando que a la nena no le había regalado nada.
Al aire del programa conducido por Matías Vázquez y Pampito le consultaron si se arrepentía de alguna de las publicaciones que hizo en el último tiempo. “Con respecto de la cartera, no pensé que un bolsito iba a ser tanto revuelo”, dijo con una sonrisa irónica. Acto seguido, la China explicó el detrás de escena: “Yo llegué a casa, estaba el bolso ahí en el sillón, casi me muero. No estoy acostumbrada, ¿qué quieren que le diga? Habíamos ido a la tienda y le dije: ‘No, no me gusta nada’ y él ‘Dale, que te quiero regalar algo’. Yo le dije: ‘A mí no me gusta comprar por comprar’. Tengo otra cultura, no sé. Siempre tuve mi plata desde que soy muy chica, me costó mucho ganarla. Entonces, tengo como esa cosa yo todavía de culpa”.

Por supuesto, también abordaron “la grieta” entre team Wanda y team China y en especial la teoría de que existe una competencia de la actriz de Casi Ángeles con las dos hijas que tiene el delantero del Galatasaray con la conductora: “Es un análisis, ese es el problema. Es que hay muchas cosas que… a mí lo que me sorprende, te juro, yo entiendo que haya dos o tres que quieran instalar algunas cosas, pero que todos se suban a ese barco y que no haya alguien que diga: ‘Che, dale. Es mucho’. Pero que instalan como que… Entiendo que vendan, entiendo que todo”.
Sobre la posibilidad de sumar un hijo con Icardi, respondió: “Ya somos papás. No, no es algo que ahora que sea un proyecto así cercano. Estamos muy bien así. Estamos tratando de acomodarnos a esta nueva vida, yo, sobre todo, que voy y vengo con mis hijos”. Y siguió: “Ya tengo tres hijos también. Es verdad que cuando era más chica, sí, mi sueño hubiese sido tener diez. Pero bueno, cuando uno los empieza a tener es distinto el lío, por ahí, la fantasía. Estoy muy feliz con mis tres hijos y estoy muy feliz con la relación también de poder disfrutar, de poder trabajar, hacer alguna serie. Estuve muchos años embarazada y con hijos chiquitos y me encantó y me los llevaba a todos lados. Pero no es un proyecto así cercano, por lo pronto”.
En definitiva, la actriz dejó en claro que, aunque es parte del juego mediático, prioriza su bienestar, su autonomía y la vida familiar lo más lejos de la polémica, y que las decisiones personales —como disfrutar un regalo o modernizar su imagen— suelen estar motivadas por su historia, su esfuerzo y su búsqueda de felicidad personal, más allá de las críticas y las interpretaciones ajenas.