El parque fotovoltaico se desarrollará en un predio de 40.000 hectáreas y generará 400 empleos directos durante la construcción (Reuters)

El grupo canadiense Aisa Group proyecta una inversión superior a los 600 millones de dólares para la construcción de un parque de energía fotovoltaica en la provincia de San Juan. El emprendimiento se presentará en el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI), como parte de su plan de expansión en el sector energético argentino.

El proyecto contempla la instalación de un parque solar en la zona de Jáchal, a la entrada de la Mina Gualcamayo. La primera etapa, de 50 MW de capacidad, se destinará al abastecimiento energético de la operación minera y forma parte del RIGI ya presentado. La segunda etapa, que alcanzará los 1.000 MW totales, será incluida en un nuevo proyecto que el grupo prevé ingresar próximamente en el mismo régimen.

La iniciativa se encuentra en etapa de estudio y prevé generar unos 400 empleos directos durante la fase de construcción. Según datos de la empresa, una capacidad de 800 MW permitiría abastecer el consumo eléctrico de más de un millón de hogares en Argentina, tomando como base un promedio de 600 kilowatts/hora/mes.

Además de su proyecto en San Juan, Aisa Group inició la construcción de otro parque solar en la provincia de San Luis. Se trata de una planta ubicada en la localidad de Nogolí, con una inversión inicial de 35 millones de dólares. Tendrá una capacidad final de 51 MW y generará 150 empleos directos.

En diálogo con Infobae, el empresario español Juan José Retamero, propietario de Aisa Group, explicó que el nuevo parque fotovoltaico se construirá dentro de una propiedad de 40.000 hectáreas que el grupo posee en la provincia de San Juan. “Son USD 600 millones aparte de los USD 1.000 millones que ya presentamos en otro proyecto en el RIGI”, detalló.

Retamero señaló que el grupo estuvo trabajando durante los últimos seis meses en cuestiones técnicas vinculadas al nuevo parque solar, con el objetivo de presentar la iniciativa formalmente ante el Gobierno en los próximos meses. “Consideramos estratégico y vital para el desarrollo todos los proyectos de la Argentina que pueden alcanzar otros 1.000 millones de dólares”, indicó. Ese monto incluye tanto la construcción del parque fotovoltaico como las líneas de evacuación necesarias para su conexión al sistema eléctrico.

En cuanto al uso de la energía, Retamero explicó que la planta actual en San Luis, de 51 MW, será suficiente para abastecer las necesidades energéticas de la mina Gualcamayo con su nueva planta de procesos. “Gualcamayo, con la nueva planta, puede necesitar no más de 50 megas. Eso nos lo daría el parque que tenemos actualmente en San Luis”, afirmó.

En cambio, la nueva planta en San Juan —con una capacidad proyectada de 1.000 MW— estará destinada al sistema interconectado nacional. “Ya se han puesto en contacto con nosotros actores que necesitan 100 o 300 megas para su consumo y, luego, evidentemente para volcar al sistema”, aseguró Retamero. El objetivo del grupo es ofrecer esa energía a diversos usuarios industriales, además de integrarla a la red nacional de distribución eléctrica.

El avance en minería

El grupo canadiense busca avanzar en la diversificación energética y complementar sus operaciones en el rubro minero. En ese sector, a través de Minas Argentinas SA, Aisa Group presentó un plan de inversiones de 1.000 millones de dólares bajo el RIGI. La iniciativa incluye el desarrollo del proyecto Carbonatos Profundos, en la misma mina Gualcamayo.

Estiman que Carbonatos Profundos producirá unas 120.000 onzas de oro anuales por al menos 17 años

La inversión minera contempla el estudio de factibilidad e ingeniería durante 2025 y parte de 2026, con vistas al desarrollo de una mina subterránea, un sistema de molienda y una planta de flotación. Según lo proyectado, Carbonatos Profundos producirá unas 120.000 onzas de oro anuales por al menos 17 años. Para la construcción se estiman 1.500 empleos y otros 400 para la etapa de operación.

Asimismo, el plan minero incluye una inversión de 52 millones de dólares en exploración durante los próximos cinco años.

Con estas iniciativas, Aisa Group busca posicionarse como uno de los principales inversores en el régimen de incentivos creado por la Ley Bases, combinando desarrollo minero y generación de energía renovable en distintos puntos del país.

La combinación de inversiones en minería y energía busca dar mayor sustentabilidad a las operaciones productivas del grupo, al tiempo que habilita la exportación o comercialización de excedentes energéticos. La empresa prevé seguir sumando proyectos al régimen de grandes inversiones durante los próximos años.