A doce días de las elecciones porteñas, solo nueve hábiles, y cuando la cuenta regresiva está dada en la batalla que enfrentará a La Libertad Avanza (LLA) con Pro de cara a lo que sucederá a nivel nacional, Manuel Adorni dedicó dos horas de su atiborrada agenda para presentarse en la Universidad Católica Argentina (UCA).
“No hay que votar personas sino ideas”, dijo en Puerto Madero. Y agregó: “Lo mismo digo por (Leandro) Santoro. Son modelos e ideas lo que hay que elegir, y no apellidos o personas porque hoy estamos y mañana no, pero las ideas siguen. Entonces, tienen que sobrevivir las ideas y eso es lo fundamental en esta batalla cultural, que es una batalla de ideas”, completó.
El hombre de la comunicación libertaria y primer candidato a legislador porteño llegó puntual a la charla del ciclo “Candidatos a las aulas”, en la que habló durante una hora y respondió las preguntas de más de un centenar de alumnos de Ciencias Políticas. Y en el que este lunes se presentó el exlibertario y también candidato porteño Ramiro Marra.
Tras su paso por la charla, Adorni también participó de una entrevista en la radio de la Universidad. En el medio desplegó su faceta de rock star del segmento joven y dedicó tiempo a decenas de selfies que le pidieron los estudiantes. Todo fue en la previa a la afiliación a LLA de Patricia Bullrich, en la Plaza Vicente López, en Recoleta.
Adorni llegó puntual y recordó sus comienzos en los medios, en tiempos del kirchnerismo y cuando los números indicaban que “no había mucha razón para ponerlos en tela de juicio”.
Por aquellos años fue que también trabó amistad con el presidente Javier Milei, el hombre que la última semana le dio un espaldarazo con una recorrida pública y todo indica que volverá a hacerlo antes del próximo 18. Antes, muchos años antes de eso, Adorni recordó entre risas que fue “peronista y después anarquista, hasta que conocí las ideas de la libertad y me enamoraron”.
Es kirchnerismo o libertad. Fin. pic.twitter.com/06AsAlr1zv
— Manuel Adorni (@madorni) May 6, 2025
En un clima relajado, Adorni incluso recordó también las charlas que tuvieron ambos en la antesala de las elecciones de 2023, en la casa de Benavídez que alquilaba el hoy mandatario antes de llegar a Balcarce 50 y mudarse a la residencia oficial de Olivos.
En tren de recuerdos, Adorni habló de cómo hace un cuarto de siglo que vive en la ciudad de Buenos Aires, reconoció que en tiempos previos al desembarco de Pro estaba “muy caída” y cómo mejoró en los dos primeros años del gobierno de Mauricio Macri. “Pero tiempos han cambiado”, dijo y remató: “La Ciudad se ha estancado”.
Adorni insistió en los dos conceptos centrales de que a la Ciudad “le falta motosierra” y agregó que Pro “quedó relegado porque no se adaptó a las demandas de la sociedad”.
También habló sobre el “desafío” de que después del 10 de diciembre, cuando asumirá como legislador, “nada cambie en materia comunicacional” en el Gobierno. Aseguró que ya tiene en mente el nombre de quien lo sucederá en el cargo y resaltó que el desafío es “cómo seguir produciendo una comunicación efectiva, relevante”.
Por otro lado se refirió, ante la consulta sobre Marra, quien suele referirse como “fisuras” a quienes viven en situación de calle. “No estoy de acuerdo en criminalizar al que vive en situación de calle”, se diferenció Adorni y completó “no son todos fisuras, ni son todos delincuentes. Hay que evaluarlo. Guarda con criminalizar a todos los que viven en la calles”.
La misma distinción hizo con los “trapitos” y distinguió que una cosa son los que “extorsionan” y otros lo que lo hacen como una forma de ganarse la vida. Adorni tampoco eludió las preguntas sobre el área de Salud y se mostró a favor de una “reciprocidad al servicio de salud”.
“Que el porteño que paga sus impuestos tenga prioridad para ser atendido en CABA”, dijo y aclaró: “restringir es un paso fundamental en materia sanitaria. Obvio que no aplica para una urgencia o una emergencia, pero la idea es bajar el gasto y promover que el gasto sea eficiente”.
Sobre el final y tras varios chistes y chicanas, Adorni dedicó tiempo a las selfies con los estudiantes y se preparó para ir al estudio de televisión desde el que hizo dúplex con Bullrich y Karina Milei desde el territorio porteño.