La Asociación Cristiana de Empresarios (ACDE) realizará en los primeros días de julio su 28° Encuentro Anual que servirá como un espacio de discusión de cuestiones decisivas para el mundo de los negocios, como el avance acelerado de la tecnología, cómo ese proceso cambió el modelo de negocios y qué rol debe ser preservado para el ser humano ante una presencia cada vez más amplia de la inteligencia artificial.
Todos estos temas desde una mirada cruzada con la fe cristiana que profesa esa asociación, una entidad empresaria que atraviesa de manera transversal distintos sectores, con hombres y mujeres de negocios de variados rubros. El presidente del encuentro anual de este año es Víctor Valle, director general de Google Argentina. El evento tendrá como lema “Forjadores de un nuevo mundo”.
Valle y Silvia Bulla, presidenta de ACDE, comentaron en una entrevista con Infobae qué visión tiene la entidad sobre la coyuntura económica actual, cuáles son las fortalezas y debilidades del nuevo modelo económico que lleva adelante el gobierno libertario, recordaron el legado del Papa Francisco y su doctrina sobre qué rol tiene el empresario en la comunidad. Enrique Shaw, el fundador de ACDE, podría ser el primer empresario en ser considerado santo para la Iglesia Católica.
-¿Qué temas va a abordar la ACDE este año en el encuentro anual?
-Silvia Bulla: En líneas generales, este es un evento que se ancla en nuestra realidad y en nuestra propuesta de valor. Todos los años, cuando iniciamos el encuentro, buscamos poner las problemáticas actuales bajo la luz de la misión de ACDE: llevar la fe y la doctrina social de la Iglesia al mundo del trabajo y del empresariado. El objetivo es cruzar esos dos mundos: los desafíos empresariales de hoy y los valores que guían a nuestra institución.
-Víctor Valle: Quisimos pensar en temáticas que interpelaran. Hoy notamos una aceleración del cambio: geopolítico, tecnológico. Hay una repregunta sobre el rol de la persona humana frente a todo lo que el hombre ha creado. El primer día va a ser más reflexivo, con un diálogo entre ciencia y religión. El objetivo es entender cuál es el rol de la persona en este nuevo mundo y cuáles son los desafíos que eso plantea para los empresarios. Luego vamos a bajar al contexto global. Pensar en un país con una nueva oportunidad. Esta vez quizás podamos salir de la trampa de levantarnos y volver a caer. Vamos a revisar el rol de las instituciones y su vínculo con el fortalecimiento de la democracia. Queremos pensar cuál es el rol del empresario hoy. La imagen que queremos proponer es la del ‘forjador de un nuevo mundo’. Que cada acción tenga como fin a la persona. Que quienes asistan se lleven tres cosas: reflexión, sentido de comunidad y compromiso.
-¿Cómo impactó el avance tecnológico acelerado y de la inteligencia artificial en el modelo de negocios y en la forma en que los empresarios toman decisiones? El Papa Francisco aseguraba que la IA era fascinante pero que implicaba riesgos y peligros.
-Bulla: La inteligencia artificial representa un avance significativo. Cuando se quiebra una era y surgen nuevos factores, ya no podemos pensar con los mismos paradigmas del pasado. Las decisiones más importantes deben ser tomadas por personas con valores, porque son las que van a sostener el futuro del mundo. El Papa Francisco hablaba de traer imágenes de la infancia y se preguntaba si la inteligencia artificial podía recrear esas memorias. Hay componentes emocionales, imágenes mentales, que la IA difícilmente pueda reproducir. Es una forma de decir que no todo se puede reducir a un algoritmo. Las personas toman decisiones, acompañan momentos de otras personas que se están formando y desarrollando, también dentro de las organizaciones. El mensaje central es que los líderes son hacedores de futuro.
-Valle: La inteligencia artificial tiene un enorme potencial para generar beneficios materiales, pero también puede ayudarnos a expandir el espíritu. La tecnología es buena en tanto la usemos para profundizar lo más propio del ser humano.
-¿Qué observan sobre la coyuntura económica argentina, qué fortalezas ven en la macro y qué deudas pendientes se sostienen?
Silvia Bulla: Una gran preocupación que tenemos como ACDE es la pobreza. Es un desafío histórico para nuestro país y está ligada a la desigualdad. La inflación es un flagelo enorme para quienes deben proyectar su vida en el mediano o largo plazo. Haber comenzado a estabilizar la inflación es un dato alentador desde el punto de vista empresarial. Hoy hay una gran variabilidad entre sectores. Algunos tienen oportunidades concretas porque se han preparado, o porque los cambios macroeconómicos los favorecen. Otros necesitarán acompañamiento para poder adaptarse a este nuevo modelo. Hay que prestar atención a esos sectores porque son grandes generadores de empleo y están vinculados al poder adquisitivo de millones de personas.
-Valle: Como sociedad hemos madurado. Hoy entendemos la necesidad de tener una moneda estable, que permita previsibilidad y que los negocios crezcan. Para sostener el cambio, hay que gastar menos de lo que ingresa. Argentina ha desarrollado sectores que hace 30 años no existían con esta fuerza: energía, minería, industria del conocimiento. Son oportunidades muy importantes. Pero el proceso para bajar la pobreza llevará mucho trabajo, probablemente décadas.
-¿Qué observan sobre el modelo productivo al que apunta el Gobierno?
-Bulla: Hay sectores que tienen una gran oportunidad en sus manos, ya sea porque se vienen preparando desde hace tiempo o porque los cambios en la macro los están favoreciendo. Pero hay otros que van a necesitar acompañamiento para hacer el salto hacia este nuevo modelo. No todos los sectores se van a poder adaptar a la misma velocidad. El Gobierno debería prestar atención a aquellos que no lo pueden lograr, porque son grandes dadores de empleo y están muy ligados a las necesidades de consumo.
–Valle: Es imprescindible hacer foco en la productividad. Es una tarea impostergable. Es la forma de liberar recursos que permitan crecer en otras áreas. Si bajamos la inflación, será posible ver cómo las empresas pueden desarrollarse y generar nuevas capacidades.
-¿Cuál es la postura de ACDE sobre la calidad institucional en la Argentina de hoy?
-Bulla: Es difícil comparar períodos históricos, pero desde ACDE siempre estamos atentos. Nos preocupó la posible postulación del juez (Ariel) Lijo a la Corte Suprema. Aspiramos a tener jueces probos, con una calidad institucional que los haga merecedores del máximo tribunal. Cuando observamos ataques o tensiones contra alguno de los poderes, desde el Foro de Convergencia Empresarial lo señalamos. Es importante reconocer los avances, como el camino económico que permitió bajar la inflación, pero también debemos marcar las desviaciones críticas que pueden afectar las inversiones y el empleo.