Oleoductos clave para impulsar la evacuación de crudo no convencional en la Argentina (REUTERS)

JP Morgan publicó su panorama energético para los años 2026 y 2027 y anticipó un período dominado por un aumento sostenido en la oferta mundial de crudo, el fortalecimiento de los proyectos offshore y la consolidación del shale como uno de los sectores más dinámicos. En este contexto, el banco destacó el papel de Argentina y afirmó que Vaca Muerta se transformó en una de las áreas de mayor crecimiento a nivel global. El informe señaló que el yacimiento argentino “emergió como un nuevo frente dinámico: escalable, de bajo costo y cada vez más integrado con infraestructura de exportación”. Para los próximos dos años, la entidad proyectó incrementos anuales de entre 120.000 y 150.000 barriles diarios en la producción total del país, impulsados por la solidez del shale neuquino.

El reporte analizó el proceso argentino dentro de un escenario internacional de abundante oferta. JP Morgan estimó que la demanda global se incrementará 0,9 millones de barriles diarios en 2026 y 1,2 millones de barriles diarios en 2027, mientras que el suministro aumentará a mayor ritmo en diversas regiones. El documento subrayó la consolidación de la producción offshore en Brasil y Guyana, junto con la continuidad del shale tanto en Estados Unidos como fuera de este país. Bajo este panorama, el banco proyectó que el superávit mundial podría alcanzar 2,8 millones de barriles diarios en 2026, lo que ejercerá presión sobre los precios del Brent y llevará el crudo a valores por debajo de USD 60 el próximo año y hacia la zona de USD 40 en 2027.

JP Morgan distinguió a los principales productores no OPEP+ y precisó que Brasil, Guyana, Estados Unidos, Canadá, Noruega y Argentina formarán el núcleo del crecimiento no convencional y convencional fuera del cartel. Sobre el caso argentino, el banco resaltó que la política regulatoria implementada por la administración de Javier Milei, y su reciente victoria electoral, alteró el horizonte sectorial y destrabó una tendencia ascendente en la producción. El informe indicó que el país experimentó “crecimientos anuales de 120.000 a 150.000 barriles diarios” tras las reformas gubernamentales, con un ascenso sostenido en Vaca Muerta atribuido a la calidad de la roca, los costos competitivos y las mejoras productivas.

De acuerdo con el análisis, la producción diaria en Vaca Muerta alcanzó 551.000 barriles en septiembre y podría superar el millón de barriles diarios en cinco años. El informe especificó que la mayor parte de estos volúmenes tendrá destino exportador, un proceso habilitado por la puesta en marcha de un nuevo oleoducto de 350 millas y el desarrollo de una terminal dedicada en Vaca Muerta Sur. JP Morgan resaltó que estos avances ofrecen “visibilidad excepcional” sobre la futura disponibilidad de barriles no convencionales procedentes de la cuenca neuquina.

Vaca Muerta será uno de los motores del crecimiento de petróleo, según JP Morgan. REUTERS/Agustin Marcarian

La expansión no se limita al aumento de pozos y producción, sino que incluye un programa de ampliación de infraestructura de transporte. El reporte describió dos desarrollos clave: Duplicar Norte, destinado a conectar áreas del norte de Vaca Muerta y ampliar los puntos de evacuación de crudo, prevé iniciar operaciones a finales de 2026 con una capacidad inicial de 220.000 barriles diarios que aumentará a 300.000 y, posteriormente, a 500.000. El segundo proyecto es el sistema Vaca Muerta Oil Sur (VMOS), liderado por YPF, que transportará hasta 550.000 barriles diarios a una terminal de aguas profundas en Punta Colorada. El texto detalló que VMOS comenzará a operar con 180.000 barriles diarios en 2026, llegará a 380.000 en marzo de 2027 y alcanzará su capacidad plena a mediados del mismo año.

Sumando ambos sistemas, la capacidad de evacuación podría elevarse a 1,3 millones de barriles diarios, conformando un corredor de exportación con escala comparable a regiones integradas del mercado mundial. Esta transformación modificará de manera sustancial la estructura del mercado petrolero local, al permitir el crecimiento sostenido del volumen sin cuellos de botella internos. Según el informe, los volúmenes del shale no solo sustituirán las caídas en los yacimientos convencionales maduros, sino que superarán ese descenso y ofrecerán un crecimiento neto en la oferta total argentina durante la segunda mitad de la década.

El análisis evaluó el contexto global en el que se insertará la expansión argentina. JP Morgan advirtió que la normalización de la demanda internacional pospandemia ya finalizó y que el impulso del consumo observado entre 2021 y 2024 respondió a un ciclo atípico. Para 2025, el banco proyecta un alza de apenas 0,9 millones de barriles diarios, atribuida a la desaceleración industrial, a las restricciones derivadas de la electrificación en China y a nuevas normas arancelarias. Pese a esto, JP Morgan prevé que el período 2026–2027 podría ofrecer un impulso adicional debido a la esperada baja en los precios internacionales. El informe destaca que los valores más bajos del Brent funcionarán como estímulo para la demanda, un efecto que podría sumar medio millón de barriles diarios en 2027.

JP Morgan estimó un aumento de entre 120.000 y 150.000 barriles diarios para los próximos dos años en Argentina. REUTERS/Mike Segar/File Photo

El documento también consideró las tensiones geopolíticas que influirán sobre el equilibrio de la oferta y la demanda. Indicó que una caída drástica de los precios podría llevar a Estados Unidos a intensificar sanciones contra Rusia e Irán, aumentando los riesgos de suministro. Además, advirtió que Rusia enfrenta costos de extracción, transporte y cargas fiscales próximos a USD 42 por barril, un umbral en el que los márgenes se vuelven negativos si el Brent cae por debajo de ese valor, lo que podría forzar reducciones involuntarias de producción. JP Morgan estimó que con un Brent en USD 49 hacia fines de 2026, los productores no OPEP enfrentarían recortes no planeados de entre 1 y 1,3 millones de barriles diarios. El banco alertó, además, que precios aún más bajos podrían afectar regiones como Colombia, Ecuador y al sector del shale estadounidense. En Argentina, Vaca Muerta presenta breakeven de USD 45 a USD 55, por lo que una cotización baja del crudo limitaría nuevas perforaciones y completamientos.

El informe también abordó la evolución de los inventarios. Según JP Morgan, los inventarios globales crecieron 1,6 millones de barriles diarios este año, impulsados por el incremento de crudo en tránsito y existencias en China. El banco remarcó que China continúa acumulando reservas estratégicas y comerciales, posibilidad favorecida por los precios bajos, y que este proceso podría elevar los inventarios chinos a 1.500 millones de barriles en 2026.

En este escenario internacional de elevada oferta, acumulación de inventarios y presiones sobre los precios, JP Morgan identificó un esquema de desarrollo sostenido para Argentina. La combinación de productividad del shale, ampliación de infraestructura y avances regulatorios delineó un perfil de crecimiento robusto. El informe recalcó que Vaca Muerta se afianzó como uno de los yacimientos de breakeven más competitivo fuera de Estados Unidos, con operadores que utilizan tecnológicas de perforación de múltiples pozos y ramas laterales superiores a tres kilómetros. La entidad concluyó que este proceso generó una industria petrolera mucho más integrada, con gran previsibilidad en los volúmenes y con un peso creciente en la oferta mundial de crudo no OPEP+.