El mercado financiero argentino retomó una suba moderada este miércoles, con la contribución de un dato macroeconómico central para la economía doméstica, el 1,5% de inflación informado por el INDEC en mayo, que igualó las mediciones de mayo de 2020 y abril de 2020 (1,5%), y también la cifra más baja desde noviembre de 2017 (1,4%), que ratifica la eficacia de la estrategia del Gobierno en materia monetaria y cambiaria.
Al cierre, el S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires ascendió un 0,8%, en los 2.187.671 puntos. El índice porteño se acopló a la tónica ascendente del orden del 0,2% al 0,4% de las bolsas de Wall Street, aunque mantiene pérdidas en el balance de junio, a pesar de los esfuerzos del Gobierno argentino para consolidar agregados monetarios, en favor del superávit fiscal y la reducción inflacionaria.
Los ADR y acciones de compañías argentinas negociados en dólares en Nueva York arrojaron números dispares. Destacó la suba de 3,7% para Banco Francés, mientras que hubo leves ganancias para las empresas del sector energético, gracias a la recuperación de los precios del petróleo, ahora por encima de los USD 68 el barril.
Los bonos soberanos en dólares -Globales y Bonares- restaron un marginal 0,1% en promedio.
Federico Filippini, Chief Economist de Adcap Grupo Financiero, afirmó que “la inflación general desaceleró al 1,5% mensual en mayo, frente al 2,8% registrado en abril, ubicándose muy por debajo de las expectativas del consenso (Bloomberg: 2,0%) y también por debajo de nuestra proyección. El mes pasado, la contribución de los precios estacionales a la desinflación fue desproporcionada, incluso en comparación con los últimos meses de 2024. Los precios subyacentes (core o núcleo) se mantuvieron relativamente estables en 2,2%, al igual que los servicios, que se ubicaron en 2,7% frente al 3% del mes anterior».
“Al igual que en meses anteriores, la reacción del mercado fue moderada, ya que comenzaron a circular rumores alrededor de las 13 horas sobre el dato de inflación, que terminó coincidiendo exactamente con la cifra oficial”, explicó Filippini.
Los operadores continúan estudiando el menú de diferentes modalidades elegidas por el Gobierno para incrementar las reservas internacionales del Banco Central.
El Banco Central cerró el miércoles la ampliación de reservas en unos USD 2.000 millones mediante operaciones de REPO (préstamo garantizado con bonos públicos) con bancos financieros internacionales, lo que se suma a la reciente colocación de un Bonte 2030 por 1.000 millones de dólares.
Esta última modalidad continuará este viernes, se informó oficialmente, con la licitación de igual título mediante colocaciones en pesos y suscripciones en moneda extranjera por hasta 500 millones de dólares.
En otra rueda sin participación oficial en el mercado de cambios, las reservas internacionales del Banco Central aumentaron en USD 91 millones, a USD 38.622 millones. Este incremento tuvo que ver con la apreciación de 1,9% del oro, y del 0,3% del yuan chino respecto del dólar norteamericano.
“A partir de ahora, dado el peso que tiene el Tesoro en el mercado de dinero, será éste quien influya de manera significativa en la cantidad de pesos y en las tasas de interés a través de sus licitaciones, por lo que consideramos posible un aumento en la volatilidad de las tasas de interés de corto plazo”, reportó la consultora Delphos Investment.
“Específicamente, mientras el Tesoro mantenga saldos depositados en el BCRA, seguirá impactando en la dinámica financiera”, subrayó.
Juan Bialet, gerente de Finanzas Personales del Grupo SBS, señaló que “actualmente los bancos pueden pagar más tasa para los plazo fijos de grandes montos (mayores a $1.000 millones) para captar más capital en un mercado donde escasean los pesos y así financiar la demanda de crédito. Esta tasa se llama Tamar y los inversores minoristas la pueden captar a través de bonos del Tesoro llamados ‘Duales’, que pagan lo mejor entre la TAMAR y tasa fija, lo que mejor rinda al vencimiento”.
“Los bonos ‘Duales TTM26′ con vencimiento marzo 2026 rinden actualmente 38% por TAMAR y 28% por tasa fija. Además tienen liquidez en el día y están exentos de impuestos para personas físicas», añadió Bialet.
Dólar estable
El dólar al público terminó sin variantes en el Banco Nación, a $1.200 para la venta. El Banco Central informó que en el promedio de bancos el billete terminó a $1.202,73 para la venta (subió 50 centavos) y a $1.160,75 para la compra.
En una rueda de negocios con un escaso volumen operado en el segmento de contado de USD 263,4 millones, el dólar mayorista subió tres pesos o 0,3% en el día, a 1.185 pesos.
“Con solo una rueda por delante para terminar la semana el tipo de cambio mayorista acumula una caída de 50 centavos, contra una baja de 2,50 pesos de toda la semana anterior”, comentó Gustavo Quintana, agente de PR Corredores de Cambio.
El dólar blue revirtió la leve baja de cinco pesos que exhibió a la mañana y terminó pactado a $1.190 para la venta, el mismo precio de cierre del miércoles. Desde el levantamiento del “cepo” cambiario hace dos meses, el billete negociado en el circuito informal cedió 185 pesos o un 13,5% desde los $1.375 del 11 de abril.
En el mercado de futuros el dólar tuvo mínimas variaciones y cierre mixto, según datos de la plataforma A3 Mercados. Los contratos con vencimiento en el fin de junio cerraron a $1.201,50 (+0,2%) y para fin de diciembre terminaron a $1.350 (-0,2%).
Los dólares financieros estuvieron operados con mínimas variantes. El “contado con liquidación” mediante bonos cerró a $1.191,06, mientras que el dólar MEP quedó a $1.187,23 pesos.