El humo se eleva desde Gaza tras una explosión, visto desde Israel, el 4 de junio de 2025 (REUTERS/Amir Cohen)

El Ejército de Israel llevó a cabo este miércoles un ataque aéreo sobre el hospital de los Mártires de Al Aqsa, marcando el que es ya el undécimo bombardeo a este centro médico desde el inicio del conflicto contra los grupos terroristas en el enclave palestino. La acción militar, realizada mediante tres drones, se basa en la información de Israel de que el hospital está siendo utilizado como refugio por combatientes de Hamas, quienes se encuentran camuflados entre instalaciones civiles. Esta operación dejó daños materiales significativos en el edificio principal.

El hospital, situado en el corazón de Gaza, ha sido blanco de ataques reiterados desde el primer incidente registrado el 10 de enero del año pasado, siendo el bombardeo anterior el pasado 13 de abril. Las autoridades de la Franja de Gaza, bajo el control de Hamas, han calificado estos ataques como parte de un patrón sistemático y deliberado de agresiones contra infraestructuras médicas y operativos humanitarios. La posición israelí es que Hamas utiliza estratégicamente instalaciones civiles para proteger sus operaciones militares, poniendo en riesgo tanto al personal médico como a los pacientes.

Los ataques en la región han causado la muerte de siete personas en operaciones con drones en localizaciones como el campo de refugiados de Yabalia y Khan Younis. Datos sobre el terreno señalan que, debido a los bombardeos continuos, los hospitales de la Franja operan al 40% de su capacidad óptima, enfrentados a una crítica escasez de suministros médicos y al daño de más del 60% de su equipamiento.

Terroristas de Hamás desfilan en la ciudad de Gaza antes de entregar a los rehenes que habían sido retenidos desde el mortífero ataque del 7 de octubre de 2023 (REUTERS/Dawoud Abu Alkas/Archivo)

En adición al contexto actual, un grupo respaldado por EEUU e Israel para operar centros de distribución de ayuda alimentaria en Gaza cerró sus instalaciones este miércoles. La serie de incidentes mortales ocurridos cerca de estas instalaciones ha suscitado severas críticas por parte de Naciones Unidas, que exigen una investigación exhaustiva. Asimismo, los aliados internacionales, incluidos el Reino Unido, han subrayado la necesidad de llevar a cabo un examen independiente de los incidentes, en un llamado que ha sido reflejado en las palabras del secretario general de la ONU, Antonio Guterres.

El Consejo de Seguridad de la ONU votó una resolución para instaurar un cese al fuego y permitir el acceso humanitario a Gaza pero fue vetada por Estados Unidos, un aliado clave de Israel, con el argumento de que “socavaría los esfuerzos diplomáticos para alcanzar una tregua que refleje las realidades sobre el terreno y envalentonaría a Hamas”.

Mientras tanto, la situación sigue deteriorándose con reportes de hambruna y una economía en declive severo, lo que subraya la urgente necesidad de una intervención concertada de la comunidad internacional. La resistencia humanitaria se fortalece con iniciativas como la Freedom Flotilla Coalition, que ha intentado romper el bloqueo marítimo para entregar asistencia, resaltando la desesperación y los esfuerzos continuos por socorrer a quienes están atrapados en el conflicto. La embarcación, que zarpó de Sicilia, lleva alimentos y suministros esenciales, aunque enfrenta la determinación de las fuerzas armadas israelíes de mantener el bloqueo.

(Con información de AFP y EFE)