El último clásico entre Peñarol y Nacional, disputado el sábado en el estadio Campeón del Siglo, se jugó sin público en las tribunas. Los incidentes del encuentro anterior disputado entre los grandes de Uruguay –en el que un policía resultó herido con una bengala náutica– motivaron esa sanción. Cerca del estadio no hubo ningún incidente, pero un enfrentamiento entre hinchas en la ciudad de Toledo (Canelones) terminó con dos simpatizantes de Nacional asesinados.

Después del partido que terminó con goleada 3-0 a favor de Peñarol, dos hombres identificados con los tricolores murieron tras recibir disparos efectuados por un policía que se había reunido con amigos del carbonero para ver el clásico del fútbol uruguayo. Las autoridades están investigando si el hecho se dio en el marco de una pelea por ser simpatizantes de equipos distintos.

La investigación es confusa.

Doble crimen en Toledo (Canelones) de parte de un policía a dos parciales de Nacional (Captura Subrayado/Canal 10)

La disputa se originó porque las víctimas fueron a la casa con la intención de robarles una bandera. El policía respondió a balazos ante la amenaza de disparar que hicieron los hinchas tricolores al llegar al lugar. Así surge, al menos, del relato que hizo el agente policial a los efectivos que llegaron al lugar.

El policía, de 24 años, estaba de civil junto a un grupo de amigos. La bandera de Peñarol la tenían colgada en un tejido en el ingreso del hogar, informó el noticiero Telemundo de Canal 12. De acuerdo a la versión oficial, fueron seis los simpatizantes de Nacional que llegaron al lugar, con indumentaria de ese club. Estaban en dos motos y uno de ellos mostró un arma de fuego.

Fue entonces que el funcionario policial comenzó a disparar y mató a dos de los seis hinchas. Los otros cuatro se fugaron.

Un video de una cámara de seguridad, que se publica al inicio de esta nota, registró que hubo al menos 15 disparos. En las imágenes –consignadas por el medio Ciudad del Plata– se ve que algunas personas salen corriendo.

El fiscal del caso decidió dejar emplazado, lo que quiere decir que será citado a declarar por esta investigación. Pero, por el momento, no se encuentra imputado y está en libertad. El fiscal espera que se avance en la investigación, que se tomen declaraciones de testigos. Una de las posibilidades es que sus disparos se hayan dado en legítima defensa.

Otra balacera tras el clásico

Aunque el episodio de Toledo fue trágico, no fue el único hecho violento que se dio tras el partido.

En Las Piedras, también en el departamento de Canelones, dos personas fueron baleadas por hinchas de Nacional que llegaron a una vivienda con la intención de robar una bandera. El episodio tiene características similares al anterior. Un grupo de amigos se había reunido para ver el partido y hasta allí llegaron dos personas. Una de ellas vestía un buzo rojo de Nacional y el otro uno gris.

Los hinchas amenazaron a quienes estaban allí, efectuaron disparos e hirieron a dos personas. Los delincuentes se llevaron la bandera que pretendían.

Martín, uno de los atacados por hinchas de Nacional que robaron una bandera de Peñarol (Captura Telemundo/Canal 12)

Martín, uno de los atacados, relató su versión a Canal 12. “Estábamos tranquilos en casa jugando un truco, festejando sano, pero no lo podés hacer porque a unas personas no les gustó perder: no puede ser, estamos todos locos”, delató el hombre.

El grupo de amigos había salido a festejar la goleada de Peñarol y gritaron a favor de su cuadro. Al lado de un parrillero se pusieron a jugar a las cartas. Fue entonces que Martín vio que, detrás suyo, había una persona con un arma, apuntándole. Pensó que era una broma. Pero luego vio que había un segundo parcial, que también estaba armado.

“Por cómo venía la movida, me imaginé que era por la bandera. Uno me decía: ‘Quedate quieto o te quemo’. Empezaron a disparar y empezamos a correr. Yo me escondí. Otros entraron”, señaló.