El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) confirmó este lunes que no logró capturar al reo John Kennedy Javier Sebastián, quien logró escapar del penal de Lurigancho, y anunció medidas drásticas contra su personal, incluida la destitución del director del penal.
A través de un comunicado, el organismo precisó que el escape ocurrió aproximadamente a las 19:30 horas, cuando el interno del pabellón 10 burló los controles de seguridad, accedió al área conocida como “tierra de nadie” y finalmente trepó el muro perimétrico para salir de las instalaciones.
En el momento en que el recluso logró escabullirse, “el personal de seguridad realizaba el pre encierro”. Pese a la reacción inmediata de los agentes penitenciarios, quienes activaron los “protocolos de seguridad y efectuaron disparos de advertencia desde el torreón más cercano”, no lograron evitar la fuga.
“El interno continuó y logró saltar el muro perimetral, lanzándose a la zona externa del penal”, se lee en el comunicado. La persecución que realizaron el personal de seguridad penitenciaria y miembros de la Policía Nacional (PNP) dentro del penal resultó “infructuosa”. Acto seguido, se dio aviso a las autoridades para activar la búsqueda y captura del interno. El caso también fue puesto en conocimiento del Ministerio Público.
El INPE indicó que ya se han iniciado las investigaciones a través de la Oficina de Asuntos Internos, con el fin de determinar responsabilidades administrativas y disciplinarias. Mientras tanto, se ha tomado una serie de medidas inmediatas.
“Sin perjuicio de lo anterior, se han dispuesto las acciones administrativas siguientes: a) Remoción del cargo al director del establecimiento penitenciario. b) Relevo del personal de seguridad involucrado. c) Reforzamiento de la seguridad interna y externa del penal”, detalló el comunicado.
El organismo aseguró que “este hecho aislado no compromete la seguridad interna y externa del penal y reafirma su compromiso con la seguridad en los establecimientos penitenciarios”. Hasta el momento, el interno continúa prófugo a doce horas del suceso.
Según testigos, Javier Sebastián gritó “¡Aleluya! Cristo vive” mientras huía. La fuga provocó preocupación entre los residentes de los alrededores, quienes exigieron mayores medidas de seguridad. En redes sociales, usuarios criticaron la aparente falta de control en uno de los penales considerados más seguros del país.
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