
En medio de las negociaciones del ministro de Economía, Luis Caputo, con el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, por la asistencia financiera en la tercera semana de octubre, el vicepresidente del Banco Central (BCRA), Vladimir Werning, se reunió con inversores en Washington y habló de la reforma tributaria que están preparando en el Gobierno y, puntualmente, del impuesto sobre los Ingresos Brutos (IIBB).
Entre el 15 y 16 de octubre, el segundo de Santiago Bausili realizó una presentación en donde además de asegurar que esperan empezar a comprar reservas a partir de 2026, al considerar que después de las elecciones del domingo se va a reactivar la demanda de dinero, dio detalles acerca de por dónde podría pasar la reforma tributaria. Un proyecto, junto con el ingreso de las inversiones, que para Caputo estaba en juego si el resultado del domingo no era favorable para La Libertad Avanza (LLA).
Pero con la victoria por 40,66% en la elección de diputados y 42,03% en senadores, cambiará la composición del Congreso a partir del 10 de diciembre y el Gobierno tendrá mayor margen para avanzar. “El BCRA está reduciendo las distorsiones detrás de la desintermediación financiera (las distorsiones tributarias provinciales siguen siendo un problema)“, destacaron en la presentación, con un gráfico en donde expusieron que el sector bancario es el rubro que mayor alícuota cobra. Lo que puede dar pistas de la reforma tributaria que se comprometió el presidente Javier Milei a mandar este año.
“La tasa impositiva provincial sobre el sistema bancario es un 140% superior a la tasa promedio”, marcaron con el 7,8%. Con una amplia diferencia con Comercio que está en segundo lugar con una tasa del 4,1% al igual que Hoteles y Restaurantes.

Pero el cobro Ingresos Brutos en el sector bancario fue apuntado por los propios integrantes del equipo económico anteriormente. “Vos tenés un gobernador que te dice que está bien aplicarle 9% de Ingresos Brutos a la renta financiera, y nunca se puso a pensar que sin financiamiento no hay inversión”, afirmó el titular de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), Juan Pazo, respecto al mandatario de Santa Fe, Maximiliano Pullaro.
Y también cuando la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) estableció el pago anticipado del impuesto en las transacciones de las billeteras virtuales. Aunque bajo el eslogan incorrecto: las críticas vinieron del lado de que se trata de un nuevo impuesto cuando era una retención anticipada.
Esta presentación de Werning en Estados Unidos no es la primera vez que el BCRA pone la lupa sobre IIBB. A principio de julio pasado, un documento elaborado por la Asociación de Bancos Argentinos (ADEBA) y remitido al BCRA detalló la carga tributaria que las provincias imponen sobre los servicios financieros a través del Impuesto a los Ingresos Brutos (IIBB).
La información incluyó una tabla comparativa con las alícuotas aplicadas, el tratamiento de los títulos públicos y los créditos hipotecarios, así como los criterios utilizados para la base imponible del impuesto. El objetivo del informe fue transparentar el impacto impositivo sobre el sistema bancario y facilitar la comparación entre distritos.
El relevamiento incluyó a las 24 jurisdicciones del país y presentó un ranking de presión fiscal. De acuerdo con el informe fechado el 3 de julio de 2025, La Pampa encabezó la lista con una alícuota de 9,10%, seguida por Buenos Aires, Catamarca, Córdoba, Chubut, Entre Ríos, La Rioja, Neuquén, Río Negro, Santa Fe, Tierra del Fuego y Tucumán, todas con un 9% sobre los ingresos brutos de las entidades financieras.
¿Baja progresiva?
Fue el propio Caputo quien aseguró que en las conversaciones con los gobernadores que lo visitan en el Ministerio de Economía se pone sobre la mesa el cobro del impuesto, incluso con los peronistas.
“Le digo que nos den una mano con Ingresos Brutos. Todos los tenemos claro que el impuesto al cheque y las retenciones son los peores y los gobernadores tienen clarísimo que Ingresos Brutos es el peor de los impuestos, peores que los otros dos que nombré”, afirmó. Pero que en muchas provincias representa el 80% de sus ingresos por lo que para ir reduciéndolo se necesitará la reforma tributaria.
Según una encuesta de la Unión Industrial Argentina (UIA), los saldos a favor de ingresos brutos que las provincias le deben a las empresas alcanza montos actuales equivalentes a los $54.000 millones y el 57% de estos son en jurisdicciones donde las empresas no tienen establecimientos.
“Las alícuotas efectivas de ingresos brutos se acercan al 4% en todo el país cuando debería ser de un máximo de 1,5%. Las empresas encuestadas indicaron que más del 10% considera irrecuperables los saldos a favor de IIBB mientras que el 40% estima que la devolución de los saldos demora hasta un año. Por otro lado, el 77% de los encuestados aseguró que solicitaron la devolución o reintegro de los saldos a favor y no lograron conseguirlo», marcaron en el comunicado de la UIA.