El encarcelado rapero iraní Amir Maghsoudloo, fue hospitalizado en Teherán el viernes tras un intento de suicidio con el consumo de fármacos en la prisión, según el Poder Judicial de Irán.
Tras la intoxicación, Amir Hossein Maghsoudloo, conocido como Tataloo, fue trasladado a un centro médico en Teherán, donde médicos especialistas monitorearon su estado”, informó la agencia Mizan, del Poder Judicial iraní.
Afirmó que con el tratamiento especializado y la atención oportuna, la condición de Tataloo está “bajo control y su estado general es favorable”.
El diario Etemad publicó este sábado algunos detalles del intento de suicidio del artista, indicando que se tomó unas 30 pastillas el jueves por la noche, por lo que ha sido internado en el hospital Loghman, en el centro de la capital iraní.
El artista cumplía una pena de 10 años de prisión por promover la “prostitución”, difundir “propaganda” contra la República Islámica y publicar “contenido obsceno”.
Además, enfrenta una pena de muerte en su contra por blasfemia tras supuestamente “insultar” al profeta Mahoma, la cual ha sido anulada de manera temporal, y el caso ha sido remitido al Tribunal Supremo para su revisión.
El rapero de 37 años había estado viviendo en Estambul desde 2018 hasta que la policía turca lo entregó a Irán en diciembre de 2023 y desde entonces permanece detenido.
El músico, conocido por sus numerosos tatuajes y por combinar rap, pop y R&B, había emigrado a Turquía después de que las autoridades iraníes le negaran la licencia para trabajar en el sector musical.
Tataloo, considerado uno de los pioneros del rap iraní, anteriormente había sido cortejado por políticos conservadores como una forma de acercarse a los jóvenes iraníes.
Tataloo incluso mantuvo una reunión televisada en 2017 con el entonces presidente ultraconservador del Poder Judicial iraní, Ebrahim Raisí, quien se había presentado como candidato en las elecciones presidenciales de ese año pero no tuvo éxito, aunque en los siguientes comicios de 2021 logró llegar a la presidencia y posteriormente falleció en un accidente de helicóptero en mayo de 2024.
Tataloo, extraditado desde Turquía en diciembre de 2023, fue inicialmente condenado a cinco años de prisión por blasfemia por el Tribunal Penal de Teherán.
Sin embargo, el Tribunal Supremo revocó el veredicto y remitió el caso a otro tribunal, que posteriormente lo condenó a muerte.
“Esta sentencia ya ha sido confirmada y está lista para su ejecución”, declaró a la prensa el portavoz judicial Asghar Jahangir.
Añadió que el abogado del cantante ha presentado dos solicitudes, una de nuevo juicio y una de clemencia, que se encuentran actualmente en revisión.
“Estas solicitudes se han registrado formalmente y están siendo revisadas”, declaró Jahangir, añadiendo que se anunciaría una decisión a su debido tiempo.
Jahangir anunció inicialmente la sentencia de muerte en enero, aunque señaló que el veredicto no era definitivo en ese momento.
El cantante iraní, con abundantes tatuajes, también fue condenado a 10 años de prisión por “promover la corrupción y la prostitución” y difundir “propaganda” contra la República Islámica.
Actualmente cumple dicha condena.
Tataloo recibió el apoyo de políticos conservadores, incluido el difunto presidente Ebrahim Raisi, quien buscó atraer a los jóvenes iraníes.
En 2015, lanzó un himno a favor del acuerdo nuclear que fue promovido por los medios estatales durante la presidencia del moderado Hassan Rouhani.
(Con información de EFE y AFP)