El 4 de agosto de 2001 marcó un antes y un después para Gustavo Conti y Ximena Capristo. Hace 24 años, ambos jóvenes, desconocidos para el público y de realidades distintas, ingresaron a la primera edición argentina de Gran Hermano. Lo que comenzó como una convivencia entre extraños dentro de una casa televisada se transformó en una de las relaciones más duraderas y reconocidas surgidas de la televisión argentina. En 2025, la pareja conmemora esas más de dos décadas desde su primer encuentro.

Gran Hermano 2001 introdujo un formato hasta ese entonces novedoso para la audiencia argentina. Una casa, varias cámaras encendidas las 24 horas y una consigna: convivir y sobrevivir a la expulsión semanal del público. Entre los participantes estaban Gustavo y La Negra, él de carácter extrovertido y ella destacada por su simpatía y carisma. Ninguno de los dos sospechaba que el reality cambiaría tanto el rumbo de su vida.

La pareja recuerda con humor y nostalgia su primer encuentro en el reality argentino

24 años después, ambos lo recuerdan con una mezcla de humor y nostalgia. En un intercambio grabado en el auto y publicado en sus historias de Instagram, Conti remarcó: “Negra. Hoy es 4 de agosto. Hace 24 años que nos vimos la cara por primera vez”. Ella reaccionó: “Es un montón”, mientras él agregó: “Cuando yo dije ‘Mirá las patas que tiene la morocha’. ¿Te acordás que te dije así? Vieja, vení que hace 24 que te aguanto, vieja”.

Además, a través de la misma red social, ambos compartieron una publicación realizada en conjunto con algunas fotos de su juventud y escribieron: “Hoy se cumplen 24 años de aquel primer día que nos conocimos. 4/8/2001. Miren nuestras caritas, cuanto colágeno. Qué jóvenes que éramos. Coincidimos en el programa de TV más visto de la historia y cuántos sueños traíamos… ¡y a ambos nos cambió la vida para siempre!“.

Ambos compartieron en redes sociales fotos y anécdotas de su paso por Gran Hermano

Así como en la primera edición del programa, en ese entonces conducido por Soledad Silveyra, Natalia Fava y Santiago Almeyda eran la pareja de la casa, en esta segunda edición fueron ellos los tortolitos del hogar televisado. El flechazo entre ambos participantes fue instantáneo y los planes de convivencia llegaron apenas salieron de la casa.

“Al principio nadie nos creía y algunos pensaron que era una estrategia. Nada que ver porque nos conocimos en la casa y nos enamoramos”, recordó ella más de una década después. Es que, en un juego donde las alianzas están a la orden del día, ellos supieron priorizar su historia, logrando superar el encierro, pero también el día después y la fama repentina, muchas veces más duro que el juego.

El flechazo entre Conti y Capristo fue instantáneo y su relación superó la fama

Durante una entrevista en Urbana Play, ambos contaron cómo fue el proceso del casting para entrar a la casa que les cambiaría la vida por completo. “Yo hice dos horas y medio de cola, más dos horas y media de viaje así que estuve cinco horas esperando en total; en esa época vivía en Avellaneda y me tocó ir hasta Martínez y en ese momentose habían anotado 250.000 personas”, rememoró la actriz. Y aseguró que cuando llegó a su casa su madre le contó que una productora había llamado para informarle que tenía que volver a ir al día siguiente porque había sido preseleccionada. Aunque todavía faltaban algunas instancias para el ingreso a la casa, no podía creer que en apenas unas horas tenía que regresar a Telefe.

Conti reveló que su experiencia fue muy similar, y confesó que creyó que no lo iban a elegir cuando vio la fila inmensa en la puerta del canal de las pelotas de colores.“Había pibes de traje, engomados, bien peinados, y yo fui con un jean y un buzo roto, que era el que tenía, y veía que ponían el formulario en una caja a medida que iban pasando; pero cuando vio el mio lo puso en otra caja, así que pensé: ‘Listo, no quedé’; pero antes de llegar a casa ya me habían llamado”.