Un clásico de clásicos que se renueva. Eso es la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, que tuvo su debut, allá, por el año 1975, y que ahora se prepara para la edición número 50, que será el año que viene, en unos meses. Por el número redondo, las autoridades de la Fundación El Libro —institución organizadora— buscan que sea inolvidable. Hoy, en un breve acto, adelantaron los primeros detalles.
“Cinco décadas hablan de una tradición, pero obligan también a un camino hacia la innovación“, comenzó diciendo Ezequiel Martínez, director de la feria, en el evento oficial que se realizó en la Biblioteca Nacional. Ente las renovaciones: la página web (donde se encuentra la información de todos los stands, pabellón por pabellón, y de todas las actividades, día por día, sala por sala) y el logo de la feria.
Habrá un pabellón dedicado a celebrar el aniversario “con cinco ejes temáticos estratégicos que incluyen exposiciones, espectáculos musicales, muestras inmersivas, propuestas innovadoras y multidisciplinarias para los lectores infantiles y juveniles, y el homenaje de Ferias como Guadalajara, Frankfurt, Madrid, Bogotá, Nueva York, Bologna, y Festivales como Centroamérica Cuenta, el Hay Global y el Festival Gabo”, agregó.
No habrá, como fue hasta ahora, una Ciudad Invitada de Honor, sino un país entero. “Y será, claro, un país hermano de América latina. Quizás uno de los que tiene más siglos de cultura para mostrarnos. Un país que nos traerá no sólo su literatura, sino también su música, sus artesanías, su gastronomía y su arte. La nación que desparramó por el sur del continente el quechua y el aymara”, dijo Martínez. Ese país es Perú.
Tampoco habrá un discurso inaugural clásico, a cargo de un autor o una autora. Esta vez será compartido y en forma de conversación. Tres escritoras mujeres: Leila Guerriero, Gabriela Cabezón Cámara y Selva Almada. “Me quedo con la idea de celebración, de compartir. De pensar a la Feria del Libro como una fábrica de lectores. Por eso los invito a que el año que viene, más que nunca, nos encontremos en los libros”, concluyó.