Este martes 23 de diciembre de 2025, apenas pasada la medianoche (es decir, en los primeros minutos del miércoles) en el Centro Espacial Satish Dhawan en la India despegará el cohete LVM3 llevando en su interior al monumental BlueBird 6, un satélite de telecomunicaciones desarrollado por la empresa texana AST SpaceMobile.

El BlueBird 6 no es solo un satélite más; es el primero de una nueva generación diseñada para romper récords en el espacio. Con una estructura de antenas (phased arrays) de casi 223 metros cuadrados, se convertirá en el satélite comercial más grande jamás desplegado en la órbita baja terrestre (LEO).

Este dispositivo, que pesa aproximadamente 6100 kilogramos, es ni más ni menos que una colosal antena 5G que estará en órbita, la primera de varias con las que AST SpaceMobile ofrecerá un servicio de 5G satelital, sumando otros 40 satélites BlueBird en órbita durante el año próximo para ampliar la cobertura del servicio.

Pero no para enviar mensajes de texto en una emergencia, como ya ofrece Starlink en Chile y otras partes del mundo: este satélite podría ofrecer banda ancha celular de alta velocidad 24/7 directamente a los teléfonos inteligentes estándar de todo el mundo, sin necesidad de equipos especiales. El sistema está diseñado para alcanzar velocidades máximas de 120 Mbps por celda de cobertura, lo que permitirá realizar llamadas, usar aplicaciones y disfrutar de streaming de alta velocidad desde prácticamente cualquier lugar.

El satélite BlueBird 6 es parte de una constelación de satélites con antenas 5G que la compañía AST SpaceMobile pondrá en órbita durante 2026

Con más de 2000 celdas activas por satélite, el BlueBird 6 tiene el potencial de gestionar millones de conexiones diariamente, cubriendo vastas áreas de manera simultánea para crear una red de banda ancha celular basada en el espacio, ofreciendo cobertura 4G y 5G en zonas donde las torres terrestres no pueden llegar; la compañía tiene un acuerdo con Personal para que, eventualmente, sus clientes puedan conectarse a estas antenas espaciales.

Cómo seguir el lanzamiento en vivo