El hombre detenido en junio de este año (mendoza.gov.ar)

Un hombre de 52 años de la ciudad de Mendoza, taxista de profesión, fue detenido en junio pasado, acusado de un delito aberrante que cometió a principios de este año: aprovechó que una de sus pasajeras, alcoholizada, se durmió durante el viaje y la violó. Sin embargo, la Justicia descubrió un dato todavía más estremecedor. Es que el chofer había abusado de otras dos mujeres bajo circunstancias similares hace casi nueve años.

La primera denuncia, presentada el 10 de mayo de 2016, la realizó una mujer de 33 años, quien relató todo lo que ocurrió la noche anterior, cerca de las 22, cuando abordó un taxi Chevrolet Corsa cerca de la cancha de Atlético Argentino, en Guaymallén.

Según su testimonio, el conductor la sujetó del cabello, la redujo en el asiento trasero, la besó y la obligó a practicarle sexo oral. El sospechoso no fue identificado en ese momento y el caso quedó sin resolver.

De acuerdo con la investigación, la seguidilla no terminó ahí. El segundo hecho, registrado el 26 de julio de 2016, involucró a una joven de 19 años que viajaba en el asiento trasero de un taxi similar en el barrio Mariano Moreno, en Las Heras. De acuerdo con lo que declaró, el conductor intentó besarla y le tocó la pierna, pero ella logró huir al abrir la puerta del vehículo.

A pesar de las coincidencias, ambos casos permanecieron estancados por la dificultad para identificar al agresor. Los que nunca imaginó el acusado es que casi nueve años después se produciría un giro en su caso.

Fue la madrugada del 26 de enero de este año, cuando una joven de 22 años denunció haber sido abusada sexualmente tras quedarse dormida en el asiento trasero de un taxi, bajo los efectos del alcohol.

Al despertarse en la Cuarta Sección, en la ciudad de Mendoza, el conductor había detenido el vehículo, le había bajado el vestido y la estaba masturbando.

A partir de este último episodio, la Fiscalía llevó adelante una rápida investigación e identificó al sospechoso. Descubrió que se domiciliaba en el barrio Villa Hipódromo, y después de reunir varias pruebas, lo detuvo en junio pasado. Fuentes judiciales consultadas por el diario mendocino detallaron que gracias a las pruebas en esa causa lograron conectarlo con los dos hechos de 2016.

De esta manera, el hombre fue imputado por abuso sexual con acceso carnal, abuso sexual gravemente ultrajante y abuso sexual simple. Se encuentra alojado en un penal de la provincia y la solicitud de prisión preventiva -pedida por la Fiscalía- será evaluada el próximo 26 de agosto.

Además de los casos de abuso sexual, el taxista enfrenta una causa por violencia de género. Su pareja, una mujer de 66 años, denunció que el 23 de marzo de 2021 sufrió agresiones físicas e intentos de estrangulamiento durante una discusión, junto con amenazas de muerte. Meses después, las autoridades lo encontraron en posesión de un revólver calibre 32 largo sin la debida autorización.

Por estos hechos, el imputado también enfrenta cargos por lesiones leves agravadas por el vínculo y por violencia de género, además de tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil. Esa causa permanece bajo investigación judicial.