El vicepresidente de Guyana, Bharrat Jagdeo, en una fotografía de archivo (EFE/JEON HEON-KYUN)

El vicepresidente de Guyana tildó el jueves de “fracaso” la elección que organizó Venezuela para elegir autoridades en la rica región del Esequibo que ambos países se disputan.

Las elecciones del 25 de mayo incluyeron por primera a un gobernador y ocho diputados al Parlamento para atender este territorio de 160.000 km2 con vastos recursos petroleros y minerales.

El almirante Neil Villamizar, candidato por el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) resultó electo gobernador, aunque su cargo es simbólico porque en la práctica Guyana administra esa región.

Para el vicepresidente Bharrat Jagdeo, los comicios fueron “ilegales y fradulentos”. “Fueron un fracaso según cualquier estándar”.

“El pueblo de Guyana, cada niño, cada hombre, cada mujer, saben instintivamente, genéticamente, que cada pedazo de nuestro territorio (…) nos pertenece”, añadió. “Nadie quiere ser parte de Venezuela, este es un territorio soberano guyanés“.

Jagdeo negó que personas cruzaran a Venezuela para participar de los comicios. Los centros de votación estaban ubicados en el vecino estado Bolívar, desde donde despacharán estos nuevos cargos.

Indicó además que las autoridades guyanesas advirtieron que cualquier venezolano residenciado en Guyana que participara de la elección “enfrentaría deportación inmediata”. “Cualquiera que trate de socavar nuestra soberanía enfrentará cargos” en la justicia.

Por su parte, el titular de Interior de la dictadura venezolana, Diosdado Cabello, dijo el miércoles que su país no descansa hasta lograr “la victoria”, en respuesta a una reciente advertencia del presidente de Guyana, Irfaan Ali, quien aseguró que la Fuerza de Defensa guyanesa está preparada para “defender cada pulgada” del territorio de su nación.

Personas esperan en un centro de votación para elegir el gobernador del nuevo estado Guayana Esequiba y sus autoridades este domingo, en la base de misiones socialista Rosa Word, en Dalla Costa, municipio Sifontes del estado Bolívar (Venezuela) (EFE/ Rayner Peña R)

“Mire, señor empleado de la (petrolera estadounidense) ExxonMobil, Venezuela es un país de paz, nunca nos hemos metido con nadie, jamás nos hemos metido con nadie, pero cuando hemos tenido que enfrentar a alguien, eso dura hasta siglos, ¿oyó? Y no soltamos hasta que logramos la victoria”, dijo el ministro en su programa semanal de televisión.

Asimismo, celebró que la Guayana Esequiba —como Venezuela llama a la zona disputada que considera su estado número 24— ya tenga gobernador, el chavista y militar Neil Villamizar, elegido en los comicios regionales y parlamentarios celebrados el pasado domingo que carecen de toda legitimidad.

En la víspera de estas elecciones, el mandatario guyanés advirtió que “quienes buscan amenazar” a su país “deben saber” que sus fbb.

Además, el gobernante elogió a los hombres y las mujeres uniformados y expresó “plena confianza” en su capacidad y disposición para proteger la soberanía de la nación.

En todo caso, la legislación venezolana establece que una ciudad cercana a la región disputada será “el asiento” de los poderes públicos de la Guayana Esequiba “hasta tanto se alcance una solución práctica y mutuamente aceptable” con el país vecino.

Tras el anuncio de los resultados electorales, el dictador Nicolás Maduro ofreció “todo el apoyo presupuestario” a Villamizar para que —aseguró— “el pueblo del Esequibo tenga todos los derechos como pueblo de Venezuela”.

La votación para esa área disputada se llevó a cabo pese a que tanto la Comunidad del Caribe (Caricom) como la Corte Internacional de Justicia (CIJ), declarada competente para dirimir sobre la controversia territorial, habían instado al Estado venezolano a abstenerse de celebrarla.

Este lunes, la Caricom reiteró su “firme apoyo a la soberanía, la seguridad y la integridad territorial de Guyana”, lo que rechazó Venezuela, que calificó estas declaraciones como “insolentes”.

Guyana pidió a la máxima corte de Naciones Unidas que ratifique las fronteras establecidas en un laudo de 1899. Venezuela apela al Acuerdo de Ginebra que firmó en 1966 antes de la independencia de Guyana del Reino Unido, que anuló el fallo anterior y sentó las bases para una solución negociada.

(Con información de AFP y EFE)