El régimen de Nicolás Maduro volvió a escalar la tensión con Guyana al lanzar una nueva amenaza sobre el territorio del Esequibo, una zona de casi 160.000 kilómetros cuadrados reclamada por Caracas. En respuesta a las declaraciones del presidente guyanés, Irfaan Ali, el llamado “número dos” del chavismo, Diosdado Cabello, advirtió que el conflicto podría prolongarse “hasta siglos”.
“Mire, señor empleado de la ExxonMobil, Venezuela es un país de paz, nunca nos hemos metido con nadie, jamás nos hemos metido con nadie, pero cuando hemos tenido que enfrentar a alguien, eso dura hasta siglos, ¿oyó? Y no soltamos hasta que logramos la victoria”, dijo Cabello en su programa semanal transmitido por el canal chavista Venezolana de Televisión.
Las declaraciones aluden directamente a Ali, quien ha denunciado públicamente los intereses del chavismo sobre el Esequibo y ha reforzado la presencia militar en la región.
Las amenazas del régimen de Maduro llegaron apenas horas después de que el mandatario guyanés asegurara que sus fuerzas armadas están listas para proteger el territorio.
“Quienes buscan amenazarnos, quienes se vuelven ambiciosos, deben saber que nuestras tropas en primera línea están listas para defender cada pulgada de nuestro país”, expresó Ali durante una visita a la aldea de Anna Regina, en el Esequibo.
“Quiero asegurarles que, en primera línea, los respaldamos con la sangre de cada guyanés, dispuesto a apoyar cualquier esfuerzo necesario contra quienes buscan desestabilizar la paz en nuestra región”, añadió el presidente guyanés.
Pese a las advertencias de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que instó a la dictadura chavista a abstenerse de realizar acciones unilaterales sobre el Esequibo, el régimen de Maduro llevó a cabo el pasado domingo una farsa electoral en la zona, donde impuso al militar Neil Villamizar como “gobernador” del territorio en disputa.
El dictador venezolano no tardó en respaldar a su nuevo funcionario y le prometió “todo el apoyo presupuestario” para gobernar la región. “El pueblo del Esequibo tendrá todos los derechos como pueblo de Venezuela”, afirmó Maduro, en abierta violación a las medidas cautelares de la CIJ, que desde diciembre de 2023 ordenó detener cualquier intento de Caracas por ejercer control administrativo sobre el área reclamada.
Guyana ha denunciado sistemáticamente ante organismos internacionales los movimientos del chavismo en la región. La Comunidad del Caribe (Caricom) reiteró esta semana su “firme apoyo a la soberanía, la seguridad y la integridad territorial de Guyana” y condenó los actos unilaterales de Venezuela. Caracas calificó esas declaraciones como “insolentes”.
La disputa por el Esequibo se remonta al Laudo Arbitral de París de 1899, que otorgó la soberanía del territorio a la entonces Guayana Británica. Venezuela desconoce el laudo y también rechaza la jurisdicción de la CIJ, que sin embargo se declaró competente para resolver el conflicto. Mientras tanto, el chavismo avanza con su estrategia de anexión de facto del Esequibo, en medio de una creciente militarización del conflicto.
La legislación impuesta por el régimen establece que una ciudad venezolana cercana a la zona actuará como sede de los poderes públicos del nuevo “estado” Guayana Esequiba, hasta que —según dice el propio texto legal— se logre una “solución práctica y mutuamente aceptable” con Guyana.
En paralelo, las fuerzas armadas de Guyana han intensificado su presencia en las zonas fronterizas, mientras el gobierno de Ali impulsa acciones diplomáticas para contener lo que considera una amenaza directa del chavismo.
“El respeto por la soberanía y la integridad territorial no es negociable”, reiteró el mandatario, quien también encabezó un evento cultural en la región para fortalecer el sentido patriótico de la población local.
La crisis por el Esequibo, lejos de disminuir, se ha convertido en un nuevo foco de tensión internacional con un régimen venezolano que avanza sin frenos en su política expansionista, desafiando las advertencias de la comunidad internacional y poniendo en riesgo la estabilidad regional.
(Con información de EFE)