El diálogo ocurrió en el playón del estadio Monumental, a escasos metros del hall de ingreso a la platea San Martín.
-¿Cuál es el objetivo de River en el Mundial de Clubes?, preguntó Infobae.
–Vamos a tratar de llegar lo más lejos posible. El que piensa que vamos a ir a pasear o a ver qué pasa, está equivocado. Somos River y queremos ganar siempre, respondió uno de los integrantes del cuerpo técnico comandado por Marcelo Gallardo.
Un día más tarde, tras el empate 1 a 1 ante Universitario de Lima en condición de local, Gallardo echó mano a un discurso similar en conferencia de prensa: “No me gusta la palabra competir: yo quiero ir y ganar. Vamos a ir con las mejores expectativas. El objetivo va a ser medirnos, las posibilidades que tengamos dependerán de cómo funcione el equipo. Si corregimos algunos déficits que tuvimos y potenciamos cosas de estos últimos dos meses, no tengo dudas de que podemos enfrentarnos con cualquiera. Yo no quero ir a ver qué pasa, no está en mi esencia. Después, si nos toca perder porque el rival hizo más méritos que nosotros…; bueno, nos ha pasado, pero no hay equipos que vos digas ‘no hay ninguna posibilidad’. A partir de esa mentalidad vamos a encarar esta competencia”.
Finalizada la fase de grupos de la Copa Libertadores, el próximo objetivo de River es el Mundial de Clubes, en el que debutará el 17 de este mes frente a Urawa Red Diamonds de Japón, en Seattle. El 21 enfrentará al Monterrey de México, en Los Angeles, y cuatro días más tarde volverá a presentarse en Seattle para medirse frente al Inter de Milán, el rival a priori más complejo del Grupo E.
Si se da la lógica y River se clasifica segundo detrás del Inter, en octavos de final podría enfrentar a Borussia Dortmund de Alemania o al Fluminense, en Atlanta. Y, de avanzar de ronda, en cuartos de final le podrían tocar Real Madrid, Manchester City o Juventus.
Por lo bajo, los dirigentes admiten que llegar a los cuartos de final sería realizar “un buen Mundial”. Sin embargo, en el plantel y en el cuerpo técnico prefieren no hacer proyecciones y confían en que el equipo estará a la altura de las circunstancias frente a todos los rivales.
Gallardo ya les trasladó a los principales dirigentes su deseo de reforzar el equipo para el segundo semestre del año con tres caras nuevas: un lateral izquierdo, un mediocampista y un delantero. Al técnico le gustaría que alguno de esos refuerzos se incorpore para el Mundial de Clubes, en la ventana de pases que la FIFA habilitará para esa competencia entre este domingo y el 10 de junio, día en que los equipos deberán presentar la lista de buena fe, de un máximo de 35 futbolistas. El propio Muñeco ya descartó públicamente la posibilidad de que alguna incorporación se sume solamente para jugar el Mundial de Clubes: el que llegue, será para quedarse.
Tal como lo definió el secretario del club, Stéfano Di Carlo, en una nota concedida a ESPN, la idea de River y de Gallardo es la de realizar un mercado de pases “quirúrgico”, con nombres muy puntuales.
En el último mercado, el entrenador buscó a Lucas Esquivel, lateral izquierdo argentino de Athletico Paranaense de Brasil, y la operación no pudo realizarse. ¿Insistirá por él o irá en busca de algún otro nombre para esa posición? El chileno Gabriel Suazo, quien llegó a un acuerdo para irse del Toulouse francés, podría ser una alternativa.
River también realizó averiguaciones por tres delanteros de renombre como Ángel Correa, Lucas Beltrán y Joaquín Correa. ¿Y los rumores sobre Cristiano Ronaldo? Por ahora solo parecen un sueño casi utópico de parte de los hinchas millonarios.
Si bien Gallardo se rehusó a hablar de nombres propios luego del choque frente a Universitario, para el mediocampo suenan los nombres de dos viejos conocidos: Guido Rodríguez y Juan Fernando Quintero, quien reclama una importante cifra de dinero que le debe el grupo empresario que lo acercó al América de Cali, con el que tiene dos años más de contrato.
En la tesorería de River ya saben que al club le ingresarán al menos 15.200.000 dólares. Ese es el monto que la FIFA le pagará a cada uno de los 32 participantes del Mundial de Clubes solo por formar parte del primero de la historia con el formato del Mundial de selecciones. “Todavía no recibimos el dinero. Calculamos que quedará acreditado una vez que comience el torneo”, dijeron a Infobae desde la tesorería del club.
Cada victoria en la fase de grupos representará un ingreso de dos millones de dólares, mientras que el empate le dará un millón de dólares a cada equipo.
Los dieciséis conjuntos que se clasifiquen a los octavos de final cobrarán 7.500.000 dólares cada uno, en tanto que los que lleguen a los cuartos de final recibirán 13.125.000 dólares por equipo. Cada uno de los cuatro semifinalistas embolsarán 21.000.000 dólares, el subcampeón se quedará con 30.000.000 de dólares y el campeón cobrará 40.000.000 de esa misma moneda.
El plantel de River viajará rumbo a los Estados Unidos el miércoles 11 de junio a las 22. En un primer momento evaluaron la chance de dormir en Miami y al día siguiente volar hacia Seattle, la sede de los partidos ante Urawa Red Diamonds e Inter. Pero modificaron el plan original e irán directamente hacia Seattle. Se alojarán en un hotel del centro de esa ciudad y permanecerán allí hasta el viernes 20, cuando tomarán un vuelo chárter hacia Los Angeles, escenario del choque contra Monterrey. El domingo 22 retornarán a Seattle para esperar el encuentro del 25 contra el Inter de Lautaro Martínez.
Es muy posible que Gallardo incluya en la lista de buena fe de 35 futbolistas a algunos juveniles de la Reserva. Los nombres que mayores posibilidades tienen de ser llevados por el Muñeco a Estados Unidos son Ulises Giménez, Santiago Lencina, el brasileño Giorgio Costantini, Agustín De la Cuesta y Agustín Obregón, hermano de Braian Romero, ex delantero de River, hoy en Vélez.
Mientras tanto, el próximo lunes River conocerá a su rival en los octavos de final de la Copa Libertadores al realizarse el sorteo en la sede de la Conmebol, en Luque, en las afueras de Asunción. El choque de ida de esa instancia, que será en condición de visitante ya que River finalizó primero en su grupo y enfrentará a alguno de los ocho segundos, está previsto para la semana del 12 de agosto. Pero ese es otro cantar: ahora, la mirada de todo River se centrará en el Mundial de Clubes, ese desafío en apariencia imposible pero que en Núñez no deja de ser un sueño gigante.