Una nueva emisión de La Voz Argentina 2025, el certamen musical que se emite por Telefe, generó un momento de tensión inesperado cuando el padre de una de las participantes expresó su disconformidad con una devolución de Lali Espósito, una de las coaches del programa. La situación se vivió durante las audiciones a ciegas, donde los concursantes buscan conquistar a los jurados mediante su interpretación vocal, sin que estos puedan verlos hasta decidir si giran sus sillas para incorporarlos a sus respectivos equipos.
La protagonista del episodio fue Abril Medina, una joven cantante de 19 años, oriunda de Córdoba capital, quien decidió presentarse con el tema “No podrás”, una balada escrita por Armando Héctor “Chiqui” Percovich. La canción, reconocida por su interpretación en versiones de cumbia a cargo de artistas como Ángela Leiva y Eugenia Quevedo, es considerada un clásico del repertorio popular argentino.
Durante la presentación, ninguno de los coaches giró su silla, lo que implicó que la joven quedara fuera de competencia en esta instancia. Finalizada su actuación, Lali Espósito tomó la palabra y ofreció su análisis. La cantante y actriz, con una trayectoria consolidada en la música pop, explicó que sintió a la intérprete “muy controlada”, y que faltó una mayor entrega emocional. “Me faltó escucharla más enojada. Como si soltaras lo que sentís y te dejaras llevar por la emoción del tema”, expresó ante el público y el resto del jurado.
En su devolución, remarcó especialmente el final de la canción: “Faltó esa garra. Sobre todo en el cierre, con esa nota que pegaste, que era arriesgada. En esos momentos el cuerpo y la voz tienen que ir con todo, sin pensar tanto en la técnica”. Su comentario apuntaba a la importancia de transmitir emociones con naturalidad, algo que, según su visión, no ocurrió plenamente en la interpretación de la concursante.
Mientras tanto, en el backstage, Nico Occhiato, conversaba con la familia de la participante. El padre de Abril, visiblemente afectado, manifestó su disconformidad con el análisis de Lali. “Me tiembla el cuerpo. Tengo una bronca…”, reconoció ante las cámaras, mientras aún resonaban las palabras de los jurados. Cuando Occhiato le preguntó si coincidía con el planteo de la coach, el hombre respondió tajante: “No, no coincido”. Luego amplió su postura: “No sé a qué le llama ‘más garra’. Es una cumbia media lenta, no es un tema para que explote la garganta. Pero bueno, son opiniones”.
Lejos de quedarse con el disgusto, el padre también recordó el esfuerzo que la familia realiza para apoyar la carrera musical de su hija. Según relató, él vendió su auto para poder regalarle un colectivo adaptado que le permite a Abril y su banda trasladarse con sus instrumentos y equipos a los shows.
En contraste con la postura paternal, la madre de Abril ofreció un análisis más mesurado. Según su visión, los nervios pudieron haber jugado un papel clave durante la presentación. “Se perdió un poco. Le faltó concentración en algunos momentos”, sostuvo con serenidad, sin desconocer el talento ni el potencial de su hija, pero reconociendo la presión emocional que implica subir al escenario de un programa visto por millones de personas en todo el país.
Fuera del escenario, ya en diálogo con el conductor del ciclo, Nicolás Occhiato, Abril Medina se mostró consciente del desafío que representó su participación. “Estaba nerviosa”, confesó con sinceridad. Aun así, se tomó con humor la situación e incluso las críticas que su padre pudiera haber tenido hacia los jurados. Lejos de mostrarse contrariada, la joven agradeció la experiencia vivida y aseguró que continuará perfeccionándose en su carrera musical.