La Cancillería argentina destacó la posición del gobierno de Israel ante la actividad petrolera de una empresa de ese país en las Islas Malvinas (REUTERS/Tomas Cuesta)

En una devolución de favores diplomáticos, el canciller Pablo Quirno destacó las declaraciones del ministro de Exteriores de Israel, Gideon Sa’ar, en la que defendió el reclamo de soberanía sobre las islas Malvinas y tomó distancia de la actividad petrolera en el Atlántico Sur que desarrollará una empresa de capital israelí en el archipiélago bajo control británico.

Valoro las declaraciones del canciller del Estado de Israel, Gideon Saar, en las que reconoce la existencia de una disputa de soberanía entre la Argentina y el Reino Unido”, señaló Quirno, a través de su cuenta personal en la red social X. “La Cuestión de las Islas Malvinas debe resolverse mediante la negociación entre las partes, de conformidad con las resoluciones de las Naciones Unidas y el derecho internacional”, completó.

Para el ministro del gabinete de Javier Milei, “las empresas de cualquier nacionalidad deben abstenerse de avanzar de manera unilateral en la exploración o explotación de recursos naturales en el área en disputa” y advirtió que Argentina continuará adoptando todas las medidas necesarias para impedirlo.

El pronunciamiento se produjo luego de que la petrolera Navitas Petroleum comunicara que su filial británica, Navitas Petroleum Development and Production, llevará adelante tareas de exploración y explotación ‘off shore’ en el Atlántico Sur, en un área cuya soberanía es reclamada por Argentina.

En un mensaje difundido este viernes en la misma red social, Gideon Sa’ar afirmó que la soberanía de la zona es “objeto de disputa entre la Argentina y el Reino Unido” y subrayó que “Israel mantiene una relación especial, sólida y estrecha con la Argentina bajo el liderazgo del presidente Javier Milei, que el pueblo de Israel aprecia de manera especial”.

El ministro israelí precisó que la compañía objetada se trata de una empresa privada, y que su gobierno no está involucrado en la actividad. Sin embargo, lamentó el malestar generado en Argentina por el anuncio. El funcionario también manifestó que Israel espera que la controversia se resuelva “mediante el diálogo entre las partes y por medios pacíficos”.

La respuesta oficial de Israel sucedió a la protesta formal presentada por el gobierno argentino frente al avance del proyecto Sea Lion, un yacimiento offshore ubicado al norte del archipiélago, impulsado por el consorcio conformado por la británica Rockhopper Exploration Plc y la firma israelí Navitas Petroleum Development and Production Limited.

Históricamente, la postura soberana argentina sostiene que tales iniciativas violan resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que instan a las partes a evitar decisiones unilaterales mientras persista la controversia por las Malvinas.

Javier Milei junto al Ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Gideon Sa'ar (Presidencia)

El gobierno de Javier Milei responsabilizó al Reino Unido por conceder licencias de exploración y explotación a través de la administración isleña y extendió su reclamo a las empresas y países relacionados. La participación de Navitas Petroleum, fundada en Israel y con sede operativa británica para este proyecto, motivó la presentación diplomática ante Jerusalén, conforme a la política de Estado que Argentina ha sostenido históricamente cada vez que se anuncian actividades hidrocarburíferas en el área en disputa.

El yacimiento Sea Lion contempla inversiones superiores a USD 2.000 millones y una producción proyectada de decenas de miles de barriles diarios. Para la administración argentina, el volumen económico del proyecto no altera el eje del conflicto, centrado en la explotación de recursos naturales en una zona bajo disputa de soberanía.

En la Cancillería argentina interpretaron la declaración de Saar como un gesto que permitió encauzar el incidente dentro de los caminos habituales de la diplomacia, evitando una escalada bilateral. Consideraron que la distinción explícita entre una iniciativa privada y la posición del Estado israelí fue una señal de respeto hacia el reclamo argentino.

Desde su llegada a la Casa Rosada, el gobierno de Milei ha profundizado el vínculo estratégico con Israel, país al que identifica, junto con Estados Unidos, como su principal aliado internacional.

La Cancillería informó que la protesta formal sigue vigente y que el país continuará utilizando herramientas diplomáticas, administrativas y legales para desalentar estas actividades. Navitas Petroleum figura en listados de firmas sancionadas por operar sin autorización en áreas bajo jurisdicción argentina, lo que refuerza la posición oficial en la disputa.