Rolando Figueroa, gobernador de Neuquén, lanzó una dura critica, a Oscar Parrilli, senador nacional y estrecho colaborador de la ex presidenta Cristina Kirchner. Lo hizo sin nombrarlo, pero con una obvia referencia al legislador. “Nos representaba una persona que no sólo no hacía respetar a Neuquén, no se hacía respetar a sí mismo: su jefa le decía pelotudo y se quedaba callado. Imagínense si ese pelotudo iba a tratar de levantar la mano y decir que necesitaba algo la provincia de Neuquén”, dijo Figueroa.
El mandatario provincial hacía referencia a un audio filtrado en 2017 en el que se escucha un diálogo entre Cristina Kirchner y Parrilli, en el que la ex jefa de Estado se refiere en esos términos a su colaborador. “Hola, Oscar”, saludó CFK. “¿Quién es?“, devolvió Parrilli. ”Yo, Cristina, pelotudo», contestó ella, en una conversación trivial que quedó en el recuerdo.
Figueroa retomó aquel episodio. “Ustedes piensan que va a tener el coraje de reclamar algo para la provincia de Neuquén si se dejaba llamar así? Tengo un especial interés en que la política se renueve a partir de entender quiénes son las personas que representariían bien al pueblo de Neuquén”, reforzó.
Las expresiones del gobernador patagónico tuvieron lugar durante un acto en la capital provincial. El tono electoral obedece a la disputa que existe por ocupar las bancas de senadores que renueva en octubre la provincia. Una, actualmente, está ocupada por Parrilli. “Nosotros queremos esa banca”, dijo Figueroa.
Durante el acto celebrado en el Centro de Convenciones Domuyo, Figueroa lanzó una serie de declaraciones que incluyeron la crítica a Parrilli, a quien acusó de no defender los intereses de Neuquén y de carecer de autonomía política. El gobernador agregó que “los cargos no se heredan, se ganan”, y cuestionó abiertamente el mecanismo de selección de candidaturas en los partidos nacionales, así como la vigencia de las listas sábana.
En el marco de la firma de un acuerdo político con el intendente de la capital provincial, Mariano Gaido, Figueroa evitó mencionar directamente a Parrilli, pero dejó en claro su referencia al afirmar que no desea más en el Senado a quienes llegan por vínculos personales y no por mérito propio.
El gobernador remarcó su interés en que la política provincial se renueve y que los representantes respondan genuinamente a los intereses del pueblo neuquino, sin depender de apellidos ligados a la “nobleza política”. Figueroa subrayó que la representación efectiva no depende del linaje, sino de la capacidad de defender los intereses de la provincia, especialmente en un contexto donde se avecinan debates clave sobre coparticipación y regalías. En ese sentido, enfatizó la necesidad de contar con provincias fuertes en el Congreso y legisladores que prioricen a Neuquén.
Al finalizar el evento, Figueroa dialogó con la prensa y abordó temas vinculados al acuerdo electoral con Gaido, así como su postura frente a la condena ratificada por la Corte Suprema a la expresidenta y exvicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. El mandatario provincial manifestó que hechos como ese han contribuido a profundizar la grieta nacional, lo que, a su entender, no ha beneficiado a la sociedad argentina. “Hace mucho tiempo existieron unos u otros hechos que contribuyen a generar una grieta en la Nación que no ha contribuido a que el argentino esté mejor. Nosotros hemos sabido construir a partir de las coincidencias y esas coincidencias las realizamos no sólo con la dirigencia, sino con el pueblo de Neuquén”, declaró Figueroa.
El gobernador insistió en que su gestión busca evitar caer en la polarización política. “Cuando nos quieren empujar a la grieta nosotros decimos que no vamos a caer en la grieta, sino todo lo contrario. Vamos a continuar trabajando con las acciones que provoquen un bienestar en el pueblo”.