El Ejército de Ecuador abatió a un presunto miembro de los Comandos de la Frontera, una disidencia de las FARC (EFE/José Jácome)

Un presunto integrante de los Comandos de la Frontera, disidencia de las FARC, murió este jueves en un enfrentamiento con militares ecuatorianos en la provincia amazónica de Orellana, informó el Ejército. Otros tres supuestos miembros del mismo grupo fueron detenidos en un operativo paralelo.

El incidente ocurrió en dos sectores de San Marcos, en la misma zona donde la semana pasada murieron once soldados ecuatorianos en una emboscada atribuida a los Comandos de la Frontera, mientras realizaban un operativo contra la minería ilegal en el sector de Alto Punino, entre las provincias de Orellana y Napo.

Un presunto integrante de los Comandos de la Frontera, disidencia de la extinta guerrilla de las FARC, murió este jueves en un enfrentamiento con militares ecuatorianos en la provincia amazónica de Orellana, informó el Ejército (@PoliciaEcuador vía X)

Según el Ejército, una patrulla localizó una vivienda donde se refugiaba un presunto miembro del grupo armado. “Los soldados, en uso legítimo de la fuerza, respondieron al ataque, resultando en la muerte del agresor”, indicó la institución castrense a través de redes sociales. Los militares incautaron el fusil que el individuo utilizó durante el tiroteo.

En una acción separada, otra unidad militar detuvo a tres hombres señalados como integrantes de los Comandos de la Frontera. En su poder llevaban tres granadas de 40 milímetros para lanzagranadas, según el reporte oficial.

Las operaciones forman parte de una ofensiva militar en la región amazónica tras la emboscada del viernes anterior, donde también murieron al menos tres atacantes.

Los militares incautaron el fusil que el individuo utilizó durante el tiroteo (@PoliciaEcuador vía X)

El Ejército investiga una posible filtración de información interna que habría facilitado la emboscada, en la que se usaron explosivos, granadas y fusiles de largo alcance.

Los Comandos de la Frontera forman parte de la Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano (CNEB), un grupo armado que emergió tras la fragmentación de la disidencia Segunda Marquetalia, que retomó las armas después del acuerdo de paz entre el Estado colombiano y las FARC en 2016.

Las autoridades ecuatorianas sostienen que esta organización mantiene presuntas alianzas con Los Lobos, una de las bandas criminales más grandes de Ecuador, con quienes buscarían controlar enclaves de minería ilegal en zonas próximas a la frontera con Colombia, como la cuenca alta del río Punino.

Este mismo jueves, el presidente Daniel Noboa emitió un decreto que incorpora a los Comandos de la Frontera, al Frente Oliver Sinisterra y a las Disidencias Comuneros del Sur como enemigos del Estado en el marco del conflicto armado interno declarado en 2024 contra el crimen organizado.

El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa (REUTERS/Karen Toro)

La guerra contra las estructuras criminales se intensifica”, sostuvo el mandatario al oficializar la medida.

Desde el inicio de este conflicto, el gobierno ha centrado su respuesta en operaciones militares contra grupos dedicados principalmente al narcotráfico y, más recientemente, a la minería ilegal.

Pese a una leve reducción en la tasa de homicidios en 2024, el país volvió a registrar un repunte de la violencia en 2025, con un promedio de un asesinato por hora, según datos oficiales.

Las Fuerzas Armadas continúan desplegadas en las zonas críticas, con énfasis en áreas mineras ilegales y corredores de movilidad de grupos armados en la Amazonía.

(Con información de EFE)