El Ejército de Bolivia informó este sábado que se abrió una investigación por la muerte de un militar de alto rango, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado dentro de un cuartel en la región oriental de Santa Cruz, hecho que calificó como “un acto criminal”.
Se trata de Juan Javier Soliz Cáceres, comandante del Regimiento de Satinadores 2 Francisco Manchego, que en la víspera recibió un disparo con arma de fuego dentro de la unidad militar, según informes policiales.
El hecho ocurrió cerca de la medianoche del viernes, cuando ya habían terminado las actividades de rutina en el regimiento militar donde de pronto se escucharon disparos.
Luego de escuchar las detonaciones, los militares de esa unidad militar auxiliaron al comandante y lo llevaron hasta un hospital donde finalmente falleció, informó la Policía.
“En coordinación con las autoridades judiciales y policiales competentes se ha abierto una investigación rigurosa para esclarecer los hechos, identificar a los responsables y asegurar que este crimen no quede en la impunidad”, señala el Ejército, mediante un comunicado oficial.
El fiscal Luis Alberto La Fuente explicó que los resultados de la autopsia señalan que el jefe militar murió por una fractura “encefálica grave por proyectil de arma de fuego” y el caso se investiga como asesinato.
Por su parte, el comandante nacional de la Policía, Augusto Russo, anunció que se llamará a declarar a la esposa del fallecido y a los militares que convivían con él en el regimiento militar.
“Rechazamos todo acto de violencia y reafirmamos nuestro inquebrantable compromiso de servicio al pueblo y de defensa de los más altos intereses vitales del Estado”, dice el comunicado del Ejército.
Asimismo, reitera que el actuar de esa fuerza militar “se fundamenta en el respeto y protección del derecho a la vida e integridad física de las personas”.
Juicio por fallido golpe militar
Por otra parte, la fiscalía de Bolivia acusó días atrás al ex general Juan José Zúñiga de terrorismo y alzamiento armado por liderar el fallido golpe de Estado contra el presidente Luis Arce en 2024.
En junio pasado un grupo de militares dirigidos por el entonces comandante de Ejército llegó con tanquetas hasta las puertas de la sede de la presidencia. La intentona golpista fracasó y horas después Zúñiga fue detenido.
Junto al entonces general, hay otros 21 acusados, entre ellos los ex jefes de la Fuerza Aérea, Marcelo Zegarra; de la Armada (Marina), Juan Arnez; y de la brigada mecanizada del Ejército, Alejandro Irahola.
Un juez de instrucción debe evaluar la acusación presentada por la fiscalía y decidir si los llama a juicio.
El ex jefe del Ejército fue detenido el mismo día de la asonada militar y encarcelado desde entonces. Al momento de su captura rechazó que su intención fuera derrocar a Arce, en el poder desde 2020. Según él, ambos acordaron esa acción para levantar la imagen presidencial, golpeada por el descontento social provocado por la crisis económica. El gobierno de Arce niega esa confabulación.
(Con información de AFP y EFE)