El mercado financiero local volvió a dar muestras de una esperada estabilización, con un dólar que experimentó bajas generales por tercer día operativo. A la vez, el regreso de las tasas en pesos a niveles consistentes con la inflación esperada y un tipo de cambio que se alejó del techo de las bandas de libre flotación habilitó una nueva mejora en las cotizaciones de acciones y bonos.
En su tercera rueda consecutiva en baja, el dólar al público cerró este martes a $1.350 para la venta en el Banco Nación, el precio más bajo desde el 30 de julio. En el transcurso de agosto la divisa resta 30 pesos o 2,2 por ciento. El Banco Central informó que en el promedio de entidades financieras el dólar minorista quedó a $1.355,58 para la venta (baja de $16,84 o 1,2%) o y a $1.315,55 para la compra.
Con un muy importante volumen negociado de USD 570,8 millones en el segmento de contado, el dólar mayorista cerró a $1.338,50 por unidad, con baja de $21,50 o 1,6% debajo del lunes. El tipo de cambio oficial anota un descenso de $35,50 o 2,6% en agosto.
El dólar quedó ahora a $119,50 o un 8,9% del techo de la banda de libre flotación ,que alcanza los 1.458 pesos.
Todos los contratos de dólar futuro -en pesos, atados a la evolución del dólar mayorista- terminaron con bajas en un rango de 0,9% a 1,2%, según datos de la plataforma A3 Mercados. Las posturas para fin de agosto terminaron a $1.403, con baja de 16 pesos o 1,1% los más negociados de una plaza que operó el equivalente a 1.801,7 millones de dólares.
Los dólares financieros se acoplaron a la tendencia, con una pérdida de 10 a 14 pesos. El “contado con liquidación” mediante bonos finalizó a $1.344,94 (-0,8%), mientras que el MEP quedó a $1.343,38 (-1%).
El dólar blue terminó operado a $1.325 para la venta, con leve baja de cinco pesos o 0,4 por ciento. El billete informal se mantiene como el más barato de todos, con una brecha negativa de 1% respecto del mayorista.
“El dólar mayorista sigue más estabilizado alrededor de los $1.350 a partir de una mayor oferta que se estarían observando los operadores por las liquidaciones y el apetito por carry. Este comportamiento podría profundizarse de continuar sin evidenciarse un traslado a precios, dado que las tasas reales todavía resultan elevadas, más allá de que la habitual dolarización electoral podría seguir como contrapartida manteniendo en esta etapa la demanda en niveles más altos», analizó Gustavo Ber, economista del Estudio Ber.
“La suba del dólar en julio es un hecho aislado, acuerdo en las metas con el FMI, suba de la recaudación y saneamiento del Banco Central aseguran una inflación en baja y peso apreciándose”, confió el economista y analista Salvador Di Stéfano.
Las reservas internacionales brutas del Banco Central restaron USD 306 millones en el día, a USD 42.717 millones, sin que se hayan efectuado pagos de deuda soberana. Estos activos habían superado los USD 43.000 millones el lunes, tras un desembolso de USD 2.000 millones efectuado por el FMI.
“Parte del refuerzo se diluirá en los próximos días, ya que el Tesoro debe abonar al organismo unos USD 824 millones por intereses y comisiones, lo que representa el 41% del desembolso“, comentó Ignacio Morales, Chief Investments Officer, de Wise Capital.
El dólar en baja apuntaló a los activos
Mientras que la cotización del dólar volvió a bajar por tercera rueda -tras el shock alcista de julio- las acciones y los bonos soberanos de Argentina operaron nuevamente en alza.
El S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires ascendió un 2,6%, a 2.346.867 puntos. El índice líder de la Bolsa local anotó la novena suba en las últimas diez ruedas operativas.
Además los títulos públicos en dólares -Bonares y Globales- recuperaron un 0,8% en promedio después de haberse hecho efectivo el desembolso de USD 2.000 millones a manos del FMI (Fondo Monetario Internacional). El organismo multilateral aprobó la semana pasada la revisión de las metas del acuerdo de facilidades extendidas con Argentina.
Los ADR y acciones de empresas argentinas negociados en dólares en Wall Street mostraron mayoría de ganancias, lideradas por el sector bancario, con Banco Supervielle (+5,9%) al frente.
Los analistas siguen de cerca el arrastre alcista del dólar en julio, ya que preocupa su eventual impacto en la inflación, por la que el Gobierno lucha para tratar de mantener bajo el 2% mensual en base a su objetivo de superávit fiscal y comercial.
El presidente liberal Javier Milei viene de vetar una suba de pensiones y una ley para asegurar la protección a personas con discapacidades sancionadas por la oposición en el Parlamento, por considerar que ponen en riesgo ese equilibrio financiero.
“Mi hipótesis es que esto es una corrección del tipo de cambio real, pero para que se corrija, la inflación no tiene que reaccionar, porque si la inflación sube lo mismo que el dólar, no corrige nada”, dijo el economista Fausto Spotorno, de la consultora Ferreres & Asociados.
Juan Manuel Franco, economista jefe del Grupo SBS, consideró que “en una semana sin muchos datos macro de relevancia, el mercado seguirá atento a la dinámica de las tasas de interés en pesos y del dólar, las dos variables que se vienen llevando todas las miradas en las últimas semanas”.
En ese sentido, las tasas de caución -préstamos entre privados-, que son una referencia para anticipar el nivel de rendimientos que podría convalidar el tesoro en las próximas emisiones de deuda en pesos, ofrecieron tasas de 26,6% nominal anual a un día de plazo, y de 35,5% a siete días, cifras ajustadas a las expectativas de inflación en los próximos doce meses.
“Frente a estos bruscos saltos cambiarios el Banco Central mantiene una activa intervención en el mercado de futuros, con funcionarios del Gobierno convencidos que la volatilidad es meramente temporaria”, indicó Reuters.