El derretimiento de Groenlandia y la Antártida acelerará el aumento del nivel del mar (Imagen Ilustrativa Infobae)

El aumento del nivel del mar podría volverse inmanejable incluso si el calentamiento global se mantiene en 1,5 °C, el umbral acordado en el Acuerdo de París.

Así lo advierte un nuevo estudio internacional publicado en la revista Communications Earth & Environment que alerta sobre una posible migración catastrófica debido al colapso de las capas de hielo de Groenlandia y la Antártida.

Incluso si se redujeran drásticamente las emisiones de combustibles fósiles para lograrlo, el nivel del mar aumentaría 1 cm al año para finales de siglo, a un ritmo superior al que las naciones podrían construir defensas costeras.

El calentamiento actual ya supera límites críticos

El informe advierte que el calentamiento actual de +1,2 °C ya es suficiente para activar procesos que aceleran el colapso del hielo polar.

El autor del estudio el profesor Chris Stokes, de la Universidad de Durham, en Inglaterra, afirmó en la publicación que “con el calentamiento actual de 1,2 °C, el aumento del nivel del mar se está acelerando a un ritmo que, de continuar, se volvería prácticamente inmanejable antes de que finalice este siglo”.

Desde la década de 1990, la pérdida de masa de las capas de hielo en ambos polos se ha cuadriplicado, convirtiéndose en el principal impulsor del aumento del mar.

Entre 1901 y 1990 el mar subía a un ritmo de 1,4 mm por año, mientras que actualmente lo hace a 4,5 mm por año. Esta aceleración está relacionada directamente con el derretimiento del hielo polar, un proceso que se intensifica con el calentamiento global.

Científicos cuestionan que 1,5 °C sea realmente un límite seguro para frenar el deshielo polar (Imagen ilustrativa Infobae)

Un límite climático que podría ser demasiado alto

El estudio científico plantea que el supuesto “límite seguro” de 1,5 °C podría haber sido sobreestimado. “La evidencia recuperada de períodos cálidos pasados sugiere que se puede esperar un aumento de varios metros en el nivel del mar, o más, cuando la temperatura media global alcance 1,5 °C o más”, explicó la profesora Andrea Dutton, de la Universidad de Wisconsin-Madison, también autora de estudio.

Entre los mecanismos que contribuyen al deshielo irreversible, el estudio destaca la retroalimentación de elevación y derretimiento: al disminuir la altura de los glaciares, quedan más expuestos al calor, lo que intensifica el proceso. También se menciona la inestabilidad de la capa de hielo marina, especialmente en zonas donde el hielo se asienta bajo el nivel del mar. Estas condiciones crean un ciclo de retroalimentación que puede provocar el colapso total de las capas de hielo, incluso con aumentos moderados de temperatura.

Impacto global sobre las ciudades costeras

Durante la última glaciación, el nivel del mar subía diez veces más rápido que ahora (Imagen Ilustrativa Infobae)

Actualmente, unos mil millones de personas viven a menos de 10 metros sobre el nivel del mar y 230 millones a menos de un metro. Según las proyecciones, un aumento de tan solo 20 cm para 2050 generaría pérdidas anuales de al menos un billón de dólares en las 136 principales ciudades costeras.

El profesor Jonathan Bamber, de la Universidad de Bristol, quien participó del estudio, subrayó que “si se llega a ese punto, cualquier tipo de adaptación se vuelve extremadamente difícil, y se producirá una migración terrestre masiva a escalas nunca antes vistas en la civilización moderna”.

La capacidad de adaptación no será la misma en todo el mundo. Países con experiencia en defensas costeras, como los Países Bajos, podrían manejar mejor el aumento del mar que naciones en desarrollo como Bangladesh.

Aunque se lograra eliminar el CO₂ atmosférico y revertir el calentamiento, el estudio advierte que la recuperación de las capas de hielo tomaría entre siglos y milenios. Esto significa que la tierra costera sumergida permanecería así durante generaciones.

Evidencias del pasado como advertencia

Durante la última glaciación, hace 15.000 años, el mar subía diez veces más rápido que hoy, impulsado por pequeños aumentos de temperatura y retroalimentaciones climáticas. Además, hace tres millones de años, cuando los niveles de CO₂ atmosférico eran similares a los actuales, el nivel del mar subió entre 10 y 20 metros.

Estos antecedentes refuerzan el argumento de que las condiciones actuales podrían desencadenar efectos similares.

Los autores del estudio plantean que para evitar consecuencias graves, el calentamiento global debería mantenerse en torno a +1,0 °C, no 1,5 °C. “Adoptar un enfoque más estricto… podría ser crucial para evitar consecuencias catastróficas a largo plazo”, concluye el informe. El llamado es a reforzar la acción climática, acelerar la transición energética y establecer nuevas medidas de adaptación costera.