El Consejo de Seguridad de la ONU condenó este jueves los ataques perpetrados por el Ejército israelí contra la capital de Qatar, Doha. Sin embargo, en el documento firmado por sus 15 miembros —incluido Estados Unidos— se evitó mencionar explícitamente a Israel como responsable de los bombardeos.
“Los miembros del Consejo de Seguridad han expresado su condena por los ataques en Doha, territorio de un mediador clave, el 9 de septiembre. Han expresado su profundo arrepentimiento por la muerte de vidas civiles”, señala un comunicado conjunto.
Los Estados miembros subrayaron “la importancia de la desescalada” y expresaron su solidaridad con Qatar, reiterando su respaldo a la soberanía y la integridad territorial del país, en consonancia con la Carta de Naciones Unidas.
“Reiteran su apoyo al vital papel que Qatar continúa realizando en los esfuerzos de mediación en la región, junto a Egipto y Estados Unidos”, añadieron, antes de pedir nuevamente la liberación de los rehenes en manos de milicias palestinas en Gaza, así como el “final de la guerra y el sufrimiento”.
En la misma línea, remarcaron la “importancia de los esfuerzos diplomáticos en curso de Qatar, Egipto y Estados Unidos”, instando a las partes a “aprovechar la oportunidad para la paz”.
El Ejército israelí confirmó haber llevado a cabo un “bombardeo de precisión” dirigido contra “la cúpula de la organización terrorista Hamas” en Doha, en un momento en que se desarrollaban consultas sobre un posible alto el fuego en Gaza.
Según la información oficial, la operación se centró en los principales líderes de Hamas, a quienes se responsabiliza de la planificación y ejecución de la masacre del 7 de octubre, así como de la conducción de la guerra contra el Estado de Israel. La ofensiva, ejecutada con el apoyo de la Fuerza Aérea, empleó armamento de precisión y se basó en inteligencia adicional para reducir el riesgo de víctimas entre la población civil.
Las autoridades israelíes aseguraron que, antes de lanzar el ataque, implementaron medidas específicas para minimizar el daño a los transeúntes, subrayando el uso de tecnología avanzada y la recopilación de datos de inteligencia como parte de su estrategia
Por su parte, Hamas aseguró que cinco de sus miembros murieron en el ataque, aunque los altos cargos de la delegación negociadora sobrevivieron al bombardeo. Además, un agente de la Policía catarí perdió la vida y varios más resultaron heridos.
Las Fuerzas de Defensa de Israel y el Shin Bet reiteraron su compromiso de continuar actuando con determinación para derrotar a Hamas, a quien consideran responsable de los ataques y de la actual situación de conflicto.
(Con información de Europa Press)