Esteban El Gringo Ribovics sumó un nuevo triunfo en su carrera dentro de la UFC al imponerse por decisión en un combate de alta exigencia frente al brasileño Elves Brener, celebrado en la cartelera principal de UFC Vegas 108. La victoria representó el segundo festejo argentino de la noche en el evento de Las Vegas, tras el de Kevin Vallejos al comienzo de la velada, y consolidó el nombre de Ribovics entre los referentes sudamericanos de las artes marciales mixtas.
El peleador salteño expresó al finalizar el duelo: “Esto es lo que soy, el guerrero salvaje argentino que soy. Tengo mucho para mostrar todavía. No creo que haya sido una buena noche para mí, pero me llevo la victoria. Sé que a la UFC le debo mucho, tengo que demostrar mucho más”. En esa línea, añadió: “Tengo más huevos y corazón que cualquier peleador que exista”, poniendo de manifiesto su determinación y entrega sobre el octágono.
El combate entre Ribovics y Brener quedó ubicado como antesala de los focos principales de la jornada, que tuvo como protagonistas estelares al japonés Tatsuro Taira y al surcoreano Hyunsung Park en categoría mosca, y el cruce coestelar entre el escocés Chris Duncan y el polaco Mateusz Rebecki por el peso ligero.
La pelea de Ribovics estuvo marcada por la intensidad desde el inicio. En el primer asalto, el argentino impuso la distancia con patadas y mantuvo la presión. Brener respondió con intentos de derribo, pero Ribovics resistió y descargó una potente combinación a la cabeza que obligó al brasileño a replegarse bajo un contundente ataque en el suelo. A pesar de la lluvia de golpes, Brener logró sobrevivir y terminó de pie un round inicial que mostró la propuesta ofensiva del argentino.
En el segundo capítulo, Ribovics mantuvo el dominio. Conectó repetidamente golpes de derecha tanto al rostro como al cuerpo de su rival. Brener usó el jab y buscó moverse, pero el argentino sostenía la iniciativa y hacía pesar su fortaleza física. El brasileño resistió, aunque acumulaba castigo y comenzaba a mostrar signos de fatiga.
El tercer asalto ofreció nuevos cambios de ritmo. Ribovics retomó el ataque a la cabeza, pero Brener encontró una reacción y se animó a intercambiar golpes en la corta distancia. Ambos peleadores se alternaron en el dominio, en un tramo final que desató la ovación del público por la entrega mostrada. Los jueces determinaron la victoria del argentino tras 15 minutos de acción continua, en una de las peleas más destacadas y que se llevó el bono de 50 mil dólares a la Pelea de la Noche
Originario de Tartagal, Salta, y con 29 años, Ribovics inició su camino en el profesionalismo a fines de 2015. Ganó proyección internacional tras noquear en solo 30 segundos al inglés Thomas Paull durante el Dana White’s Contender Series en agosto de 2022. Desde que firmó contrato con UFC, cosechó una serie de resultados dispares: debutó con una derrota ante Loik Radzhabov y sumó posteriormente tres victorias al hilo, incluidas las obtenidas ante Kamuela Kirk y Terrance McKinney, para luego volver a caer en la previa a este combate.
El argentino arribó a UFC Vegas 108 con un registro previo de 14 victorias y 2 derrotas. La más reciente había sido en marzo, por decisión dividida frente al marroquí Nasrat Haqparast. A pesar de ese traspié, Ribovics se repuso para coronar un nuevo triunfo en Las Vegas.
Además del éxito de El Gringo, otro argentino celebró en la misma jornada: Kevin Vallejos venció al estadounidense Danny Silva en el primer cruce de la cartelera principal, sumando un motivo de orgullo adicional para la comunidad de las artes marciales mixtas en Argentina.
En cuanto a Elves Brener, de 27 años, la derrota supuso su tercer revés tras haber debutado en UFC en 2023 y conseguido tres victorias. El brasileño llegó a este enfrentamiento con un balance de 16 triunfos y 5 derrotas a lo largo de su carrera profesional.
La velada de UFC Vegas 108 quedó marcada por la entrega de ambos peleadores en un combate que les valió el reconocimiento económico correspondiente a la “Pelea de la noche”, junto a la de Chris Duncan y Mateusz Rebecki. Ribovics suma así un incentivo para continuar su progresión dentro de la organización, en un circuito que demanda evolución y resultados constantes.