El Departamento de Estado de Estados Unidos advirtió este sábado sobre “informes creíbles” que apuntan a que el grupo terrorista palestino Hamas prepara un ataque inminente contra civiles en Gaza, lo que podría constituir una “violación directa y grave” del alto el fuego vigente. La comunicación, emitida por el Gobierno de Donald Trump, señaló que la posible acción no solo rompería los términos del acuerdo de cese de hostilidades, sino que “socavaría los importantes avances logrados mediante la mediación internacional”.
En su declaración, el Departamento de Estado subrayó que en caso de que Hamas lleve adelante el ataque, “se adoptarán medidas para proteger a la población de Gaza y preservar la integridad del alto el fuego”. Fuentes diplomáticas estadounidenses confirmaron, además, que la advertencia fue transmitida a los países que fungen como garantes de la tregua y advirtieron que se mantendrán atentos a cualquier desarrollo que altere la estabilidad relativa lograda en la región desde la firma de la tregua, el pasado 9 de octubre.
El cese al fuego, aceptado por Israel el jueves de la semana pasada, puso fin a casi dos años de intensos bombardeos sobre la Franja de Gaza, los cuales dejaron al menos 67.967 muertos, según cifras del Ministerio de Salud local respaldadas por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). El acuerdo, rubricado por Hamas e Israel, estableció la liberación de todos los rehenes por parte del grupo palestino y el retiro del ejército israelí hasta la denominada “línea amarilla”, aunque la vigencia del alto el fuego se extiende a todas las zonas de Gaza.
La Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) informó que hasta el miércoles pasado había 190.000 toneladas de ayuda en proceso de autorización para ingresar a Gaza bajo supervisión israelí. Sin embargo, los habitantes de la Franja siguen a la espera de la apertura del cruce fronterizo de Rafah, que conecta Gaza con Egipto y es considerado vital para el acceso de asistencia y la salida de personas. Según reportes recogidos por la prensa israelí, la demora está asociada a la negativa de Hamas de entregar inmediatamente los cuerpos de los rehenes israelíes fallecidos.
En declaraciones a Channel 14, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu advirtió este sábado que la guerra concluirá una vez se logre la “desmilitarización de la Franja de Gaza”, lo que implica el desarme total de Hamas. “La fase B también implica el desarme de Hamas, o más precisamente, la confiscación de armas de Hamas. Cuando esto se haya logrado, entonces la guerra terminará”, aseguró Netanyahu, en referencia a las negociaciones en curso y la entrega progresiva de los restos de rehenes.
El director de operaciones humanitarias de la ONU, Tom Fletcher, visitó Ciudad de Gaza y describió el escenario como una “tarea monumental” para las agencias de ayuda internacional, que aspiran a distribuir un millón de comidas diarias y restablecer servicios básicos en los próximos 60 días. Fletcher declaró a AFP que amplias zonas de la ciudad se han transformado en “un terreno baldío” tras los ataques.
Las partes enfrentadas se acusan mutuamente de incumplir los términos del alto el fuego. Israel advirtió que no reabrirá el cruce de Rafah hasta que reciba los restos de todos los cautivos fallecidos, mientras Hamas sostiene que los cierres fronterizos dificultan la entrega de los cuerpos.
El saldo del conflicto iniciado el 7 de octubre de 2023, tras el ataque de Hamas sobre territorio israelí, deja 1.221 muertos en Israel —la mayoría civiles— y cerca de 68.000 víctimas mortales en Gaza, donde la cifra incluye también a numerosos civiles. Las autoridades estiman, además, que cerca de 10.000 cuerpos permanecen aún entre los escombros, mientras la comunidad internacional presiona por la implementación total de los acuerdos de paz impulsados desde Washington.
(Con información de AFP y EFE)