El Banco Central (BCRA) no pudo comprar reservas por tercer día consecutivo, pese a la brusca reducción que mostró el monto de negocios operados por la plaza cambiaria oficial. Eso colaboró para que su tenencia total perfore el nivel de los US$30.000 millones por primera vez en lo que va del año.

La entidad, que venía de vender US$117 millones en las últimas dos ruedas tras acumular compras por US$1517 millones en las catorce jornadas previas, cerró sus intervenciones hoy con un saldo neto nulo por sus compras y ventas, pese a que se hizo notar una sensible baja en la demanda de divisas.

El tema es que ella estuvo a la vez acompañada por una disminución en la oferta, lo que explica la merma mayor al 44% registrada en el volumen de negocios que, tras haber llegado a los US$500 millones el martes y a los US$415,5 millones ayer, se hundió hoy hasta los US$ 232 millones. Es el menor monto para una rueda “normal” en lo que va del mes, ya que en la primera de la semana había sido de US$225 millones, pero mientras había inactividad por un feriado en Estados Unidos.

Los operadores están notando un cambio en la conducta del mercado, aunque esperan la evolución de las próximas ruedas para arriesgar conclusiones. “Lo que notamos es que el BCRA no vendía en dos jornadas consecutivas desde fines de diciembre, cuando accedieron al mercado aquellos importadores que habían esperado el cese del pago por adelantado del impuesto PAIS a fines de noviembre, lo que impulsó la demanda y determinó entonces esos saldos negativos”, recordaron en un informe desde Portfolio Personal Inversiones (PPI).

Las reservas cerraron en US$29.837 millones.

“Como en aquel entonces, detrás de estas ventas, hay una mayor demanda privada. Saltó de un promedio diario de US$92 millones en las cinco ruedas previas a US$376 millones el martes, primer día tras el feriado en Estados Unidos, y US$298 millones ayer. En tanto, la oferta privada también aceleró, pero no fue suficiente para compensar la mayor demanda privada”, explicaron con el movimiento registrado hasta ayer.

El nivel de las liquidaciones es el que llama la atención a muchos operadores ya que, ante el anuncio anticipado de una próxima reducción a la mitad en la tasa de crawling peg, se especulaba que los vendedores tendrían incentivos para apurarlas en estas últimas ruedas de enero. Más aún cuando en la jornada se estabilizó el mercado de futuros cambiarios (cerró con leves rojos generalizados a lo largo de toda la curva), tras una seguidilla de ruedas en alzas que hicieron a muchos especular por la posibilidad de un “saltito” cambiario al momento de procederse al desarme del cepo, en unos meses.

Muchos vinculan esa merma con el final de la denominada cosecha fina, en alusión al trigo. Por lo pronto el BCRA mantiene un saldo comprador favorable en unos US$1400 millones en lo que va del mes, aunque a su vez usó (y perdió) la mitad de ello en sostenidas intervenciones sobre los dólares financieros para mantener bajo tutela a la brecha cambiaria.

La sequía compradora es la que estuvo detrás del nuevo descenso de US$302 millones que mostraron reservas brutas o totales de esa entidad, perforando como se dijo los US$30.000 millones, al cerrar en US$29.837 millones. Es decir, están apenas US$225 millones por encima del “piso” marcado a fin del 2024 y pese al ingreso de US$1000 millones que el BCRA logró al pactar un repo con bancos internacionales.

Todo sucedió en una jornada en la que el BCRA habilitó una ajuste al alza de $0,50 en el dólar mayorista que cerró a $1048,50 por unidad para la venta, con lo que acumula en la semana un avance de $4,50. “Por ahora, iguala la corrección final de la semana anterior”, hizo notar el operador Gustavo Quintana, de PR Cambios.