
El presidente estadounidense Donald Trump, el primer ministro canadiense Mark Carney y la mandataria mexicana Claudia Sheinbaum coincidieron este viernes en Washington durante el sorteo del Mundial de Fútbol 2026, evento que será organizado conjuntamente por Estados Unidos, Canadá y México. Los mandatarios aprovecharon la ocasión para mantener una reunión privada de aproximadamente 45 minutos, según informó una portavoz de Carney a la agencia AFP, y reafirmaron su intención de seguir colaborando en temas comerciales, en medio de crecientes desafíos en la región.
Los tres líderes se reunieron por primera vez en público en el Centro Kennedy de Washington, sede de la ceremonia del sorteo, y participaron en un acto simbólico extrayendo las bolillas de sus respectivos países. El ambiente fue calificado como cordial, con los mandatarios conversando y riendo, de acuerdo con imágenes difundidas y reportes de la radiotelevisión pública canadiense CBC.
En declaraciones recogidas por la AFP, una portavoz de Carney confirmó que los tres dirigentes mantuvieron un encuentro después del evento deportivo. El presidente estadounidense afirmó ante los medios que la colaboración con sus socios regionales ha sido positiva: “Hemos trabajado estrechamente con estos dos países, y la coordinación, la amistad y la relación han sido extraordinarias”.
Claudia Sheinbaum, en su primer viaje a la capital estadounidense desde que asumió la presidencia mexicana, describió el encuentro como “muy bueno”, según informó a EFE al término del sorteo.
En un mensaje publicado en la red X, Sheinbaum añadió: “Hablamos de la gran oportunidad que representa la Copa Mundial de Fútbol 2026 para los tres países y de la buena relación que tenemos. Acordamos seguir trabajando juntos para temas comerciales”.

El primer ministro canadiense, Mark Carney, busca restablecer el diálogo bilateral con Estados Unidos tras una etapa de tensiones, marcada por una campaña televisiva en su país contra los aranceles impuestos por Washington, lo que provocó la suspensión de negociaciones comerciales en octubre pasado. Canadá es el segundo socio comercial de Estados Unidos y un proveedor clave de acero y aluminio, sectores especialmente afectados por las políticas proteccionistas estadounidenses.
La reunión se produce en un contexto de incertidumbre por el futuro del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC), acuerdo de libre comercio que debe ser revisado en 2026. El presidente Trump anunció recientemente que baraja la posibilidad de dejar que el tratado expire para buscar un nuevo acuerdo comercial con sus socios, y manifestó que “México y Canadá se han aprovechado de EEUU”, en declaraciones a la prensa el miércoles anterior.
La situación económica de México enfrenta presiones adicionales por la postura estadounidense sobre política comercial, dado que más del 80% de las exportaciones mexicanas tienen como destino Estados Unidos. La administración de Sheinbaum ha respondido a exigencias del gobierno estadounidense desplegando tropas en la frontera común y trasladando a capos del narcotráfico a territorio estadounidense, aunque Trump ha reiterado en repetidas ocasiones que podría considerar acciones militares para combatir a los cárteles en suelo mexicano.
Durante la ceremonia, el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, entregó a Trump un galardón especial, el ‘Premio FIFA de la Paz’, en una celebración que acentuó la imagen de sintonía entre los líderes presentes. Al término del evento deportivo, Trump sorprendió al público al bailar el “YMCA” de Village People, himno habitual en sus campañas, mientras Sheinbaum y Carney lo observaban desde sus asientos.
El evento simbolizó una tregua en las fricciones diplomáticas recientes, incluidas las amenazas arancelarias y la suspensión de negociaciones dentro del T-MEC, así como las tensiones derivadas de la política migratoria y la lucha regional contra el narcotráfico. La ‘foto de los tres amigos’, evocando las cumbres trilaterales previas, no garantiza la celebración de una nueva cumbre formal durante el actual mandato estadounidense, pero sienta las bases para retomar la cooperación norteamericana en vísperas del Mundial que reunirá a las tres naciones anfitrionas.
(Con información de AFP y EFE)