Donald Trump afirmó que designará a Arabia Saudita como aliado importante fuera de la OTAN durante una visita oficial del príncipe heredero Mohamed bin Salmán a Washington, donde ambos gobiernos anunciaron nuevos acuerdos económicos, militares y tecnológicos.

Durante una cena en la Casa Blanca, el presidente estadounidense declaró: “Esta noche, me complace anunciar que vamos a llevar nuestra cooperación militar a cotas aún más altas al designar oficialmente a Arabia Saudí como aliado importante no miembro de la OTAN, algo que es muy importante para ellos”.

Añadió: “Y te lo estoy contando ahora por primera vez, porque querían guardar un pequeño secreto para esta noche”, al explicar que la designación se suma a una lista de solo 19 países.

Horas antes, en una reunión en la Oficina Oval, el príncipe heredero saudita anunció un incremento sustancial de las inversiones de su país en Estados Unidos. “Vamos a anunciar el aumento de los 600.000 millones (ya comprometidos con EEUU) a casi 1 billón de dólares para inversión, inversión real y oportunidad real en muchas áreas”, afirmó Mohamed bin Salmán. El aumento ampliará compromisos en sectores como tecnología, inteligencia artificial y energía.

Trump respondió durante el encuentro: “Como es mi amigo, quizá lo convierta en un billón, pero tengo que convencerlo”. La cita marcó la primera visita oficial del heredero saudita a Washington en más de siete años, en un contexto de ampliación de los vínculos estratégicos.

Horas antes, en una reunión en la Oficina Oval, el príncipe heredero saudita anunció un incremento sustancial de las inversiones de su país en Estados Unidos (REUTERS)

Según un funcionario de la Casa Blanca, los montos de inversión mencionados se aplicarían a proyectos de inteligencia artificial, infraestructura energética y nuevas iniciativas industriales. Ambas delegaciones acordaron avanzar con más reuniones técnicas y misiones empresariales.

El intercambio incluyó negociaciones sobre tecnología avanzada, energía nuclear civil y ventas militares. En ese marco, Bin Salmán manifestó su interés en adquirir los cazabombarderos F-35, considerados los más sofisticados del arsenal estadounidense. Trump señaló: “Defenderé la propuesta para que Arabia Saudita acceda a la mejor tecnología militar fabricada en nuestro país”.

El recibimiento en Washington incluyó honores reservados a visitas de Estado, un desfile militar y la presencia de aviones F-35 como parte de la exhibición oficial. Más tarde, la primera dama Melania Trump ofreció una gala en la residencia presidencial con funcionarios, empresarios y figuras internacionales, entre ellas el futbolista portugués Cristiano Ronaldo, actualmente vinculado a clubes sauditas.

Cristiano Ronaldo asiste a una cena ofrecida por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en honor del príncipe heredero y primer ministro saudí, Mohammed bin Salman, en la Casa Blanca, en Washington (REUTERS/Tom Brenner)

Otro punto de la agenda fue la normalización de relaciones entre Arabia Saudita e Israel en el marco de los Acuerdos de Abraham impulsados por Washington. Trump reiteró su interés en incorporar a Riad al pacto. Bin Salmán respondió que cualquier avance requiere “una vía clara e irreversible para la creación de un Estado palestino”.

Ambas delegaciones anticiparon que avanzan en un marco de cooperación para energía nuclear civil, centrado en transferencia tecnológica y capacitación de personal con fines exclusivamente pacíficos.

(Con información de AFP)