La polémica en torno al Balón de Oro todavía sigue muy presente entre el madridismo. El club blanco recibía este martes al AC Milan en Champions y los aficionados del Real Madrid no han dudado en mostrar su descontento con lo ocurrido durante la entrega del premio a mejor jugador del mundo, que en un primer momento parecía que sería para Vinicius, pero acabó llevándoselo Rodri Hernández. Con los jugadores sobre el terreno de juego, el himno de la competición europea ha comenzado a sonar y las gradas madridistas han opacado los míticos acordes con una atronadora pitada.
Una noche más, el Estadio Santiago Bernabéu acogerá una noche de Champions. Una de esas veladas mágicas que solo las estrellas pueden protagonizar y donde todo puede ocurrir y más si te llamas Real Madrid, el equipo de las remontadas imposibles, que tiene esa esencia, ese algo incomprensible que nadie entiende y que le lleva a salvar los partidos cuando todos han bajado los brazos. Este martes se visten de gala para recibir a un viejo conocido en la competición: el AC Milan. El equipo italiano se ha medido en múltiples ocasiones a los blancos en la competición de las estrellas y una vez más el destino les volvía a cruzar.
Sin embargo, la grada blanca tenía una cuenta pendiente desde hacía una semana. El madridismo no olvida y mucho menos cuando afecta a un jugador. Tras el calentamiento inicial, los jugadores enfilaban el túnel de vestuarios para recibir las últimas indicaciones antes de que el balón comenzara a rodar sobre el césped. Tras ello y con el himno de la Champions de fondo, los futbolistas de ambos equipo han comenzado a saltar al terreno de juego. Justo en ese momento, la grada ha protagonizado una atronadora pitada contra la UEFA por lo ocurrido el pasado 28 de octubre en París, durante la gala del Balón de Oro.
Qué pasó con el Balón de Oro
La misma mañana en que iba a entregar el Balón de Oro, salió a la luz que ni Vinicius ni el Real Madrid iban a acudir a la gala. ¿El motivo? El delantero brasileño no recibiría el galardón, a pesar de que todo parecía indicar que era el favorito para ello. El jugador del club blanco se enteró durante la noche del domingo de que no sería el premiado y decidió no acudir a la gala. Florentino Pérez y el resto de su equipo respetaron la decisión del delantero y actuaron de la misma manera. Consideraron entonces, y probablemente todavía lo piensan, que se trató de una falta de respeto de la UEFA y del Balón de Oro la forma en la que se otorga el premio.
Finalmente, fue Rodri quien se llevó el reconocimiento a mejor jugador del mundo. El jugador del Manchester City escribió su nombre en los libros del fútbol en general y del español en particular, al convertirse en el segundo jugador de España en ganar el premio a mejor jugador del mundo. El centrocampista español ganó la temporada pasada la Premier League y tuvo un papel importante durante la Eurocopa que levantó la selección española en Alemania. Por ello, la UEFA reconoció ese esfuerzo y relevancia durante la pasada campaña con el Balón de Oro.