El Paseo de la Historieta recorre las calles adoquinadas de San Telmo y Monserrat en la ciudad de Buenos Aires. Según información del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, se inauguró el 20 de julio de 2012 como iniciativa conjunta del Ministerio de Cultura y el Museo del Humor. El proyecto surgió con el propósito de rendir homenaje a los personajes más emblemáticos de la historieta argentina y a sus creadores, con la consigna de unir generaciones y fortalecer la identidad local, las costumbres y los valores reflejados por los grandes humoristas gráficos del país.
En un entorno que mezcla memoria, arte y gastronomía, los visitantes pueden descubrir esculturas a escala real de más de veinte personajes clásicos, todas instaladas en la vía pública. Las figuras, realizadas por Pablo Irrgang, se confeccionaron en resina epoxi reforzada, fibra de vidrio y pigmentos, lo que proporciona gran firmeza y resistencia frente a las inclemencias del tiempo y el contacto cotidiano. El circuito se completa con siete murales pintados por artistas argentinos que aportan contexto y color a las esculturas.
Ubicado en el Casco Histórico y extendido hacia el BAM, el Paseo de la Historieta invita tanto a grandes como a chicos a compartir fotos, anécdotas y recuerdos. El recorrido se cruza, además, con bares antiguos donde hacer una pausa y disfrutar del ambiente porteño más tradicional.
El Consejo Asesor del Museo del Humor, junto a expertos y artistas, participó de la selección minuciosa de cada personaje exhibido. Su objetivo fue poner en valor, mediante una revisión exhaustiva, aquellos personajes que dejaron huella en la cultura local y resonaron también en el exterior. En la actualidad, muchas de las esculturas se encuentran en proceso de restauración, lo que da cuenta tanto de la vitalidad del circuito como de su actualización constante.
Una por una, todas las esculturas que se pueden ver en el paseo de la historieta
Mafalda y sus amigos
El recorrido inicia en Defensa y Chile, donde Mafalda se muestra sentada en un banco junto a Susanita y Manolito. Creada por Quino en 1964, Mafalda simboliza una mirada lúcida, contestataria y pacifista sobre la sociedad. La escultura invita a quienes pasan a sentarse y dejarse fotografiar junto a la niña que tanto interpeló a generaciones de lectores.
Isidoro Cañones
En Balcarce y Chile, se encuentra Isidoro Cañones, el playboy porteño ideado por Dante Quinterno. Con su porte canchero y picardía, Isidoro encarna el glamour y la noche del Buenos Aires de otra época.
Larguirucho y Superhijitus
En la esquina de Balcarce y México, aparecen dos personajes de Manuel García Ferré: Larguirucho, ingenuo y bueno, y Superhijitus, el héroe de sombrero mágico que defiende a los más débiles.
Matías
Entre México y Venezuela, sobre Balcarce, espera Matías, de Sendra. Niño reflexivo y de gran imaginación, su escultura lo retrata pensativo y con su tabla de skate siempre cerca.
Don Fulgencio
En Balcarce y Venezuela, Don Fulgencio de Lino Palacio representa al típico jefe de oficina de tiempos pasados. Con humor irónico, encarna las tensiones y costumbres del mundo laboral argentino.
Clemente
Balcarce entre Venezuela y Av. Belgrano alberga a Clemente, creación de Caloi. De gran pico y mirada crítica, Clemente es símbolo del humor popular y la sátira político social en Argentina.
Las Chicas Divito
En la intersección de Av. Belgrano y Balcarce, lucen las esbeltas Chicas Divito, íconos de la belleza y vanguardia de los años cuarenta y cincuenta. Fueron dibujadas por Guillermo Divito y representan la libertad femenina de otra época.
Patoruzú
En Balcarce y Alsina, la figura de Patoruzú recuerda al héroe tehuelche noble y generoso, símbolo de identidad nacional desde 1928. La escultura de Dante Quinterno rinde homenaje a los valores del coraje y la justicia.
Don Nicola
En Balcarce 259, Don Nicola, de Héctor Torino, personifica al inmigrante solidario del conventillo, siempre generoso y abierto a la comunidad.
Diógenes y el Linyera
La esquina de Av. Belgrano 150 exhibe a Diógenes y el Linyera, personajes del artista Tabaré. Su visión filosófica y melancólica invita a repensar la ciudad desde sus márgenes.
Negrazón y Chaveta
En Azopardo 380, Negrazón y Chaveta de Alberto Cognigni ofrecen un humor absurdo y rupturista, fiel reflejo de la cultura popular de los años sesenta.
Langostino y Corina
En Av. Paseo Colón y Moreno, Langostino, el marinero de Eduardo Ferro, navega junto a su barco Corina y enfrenta desafíos llenos de humor melancólico.
La Jirafa
En Balcarce 645, destaca La Jirafa de Mordillo, un personaje poético que transmite ternura y humor visual sin necesidad de palabras.
Inodoro Pereyra y Mendieta
En Balcarce 476, Inodoro Pereyra y su fiel amigo Mendieta, ideados por Roberto Fontanarrosa, homenajean el humor filosófico y la tradición pampeana.
Isidorito y Patoruzito
En Av. Paseo Colón y Belgrano, la escultura de Isidorito y Patoruzito, versiones infantiles de los personajes clásicos de Quinterno, conquistan nuevas generaciones.
El Eternauta
En Moreno y Azopardo, aparece El Eternauta, proyectando la lucha frente a lo desconocido. La creación de Héctor Germán Oesterheld y Francisco Solano López ganó aún más popularidad por su adaptación para televisión.
El Loco Chávez
En Av. Belgrano 280, El Loco Chávez, de Horacio Altuna, retrata las peripecias cotidianas de un periodista ágil y romántico.
Tía Vicenta
En Balcarce 683, Tía Vicenta de Landrú aporta su agudeza y humor sin filtros, características que la convirtieron en una voz imprescindible del comentario social y político.
Gaturro
En la esquina de Av. Belgrano y Azopardo, destaca Gaturro de Nik, un personaje contemporáneo que se suma al circuito y conecta con nuevas audiencias.}
El paseo se completa con murales donde los personajes de Manuel García Ferré y otros grandes dibujantes argentinos suman color y contexto a este recorrido. Así, el Paseo de la Historieta se consolida no solo como un mapa cultural sino como un viaje por la identidad y la memoria argentina, abierto para quien quiera revivir sus historias en cada esquina del barrio.