Fernando Daniel Pistone, de 32 años, trabajaba en el Hospital de Niños de La Plata, pero tenía una vida oculta bajo el apodo con el que se hacía llamar: “Fer, El Patrón”. Según fuentes del caso, también manejaba un kiosco donde se vendía droga en la localidad platense de Los Hornos.
Una investigación en su contra determinó que se dedicaba al narcomenudeo y que usaba la fachada del local para disimular la actividad. Pero la maniobra fue descubierta y Pistone cayó detenido en las últimas horas a manos de la Policía Bonaerense.
La investigación se originó a principios de mayo a partir de entrevistas realizadas por personal policial a vecinos de la cuadra ubicada sobre la calle 142, entre 71 y avenida 72.
Los vecinos señalaron que allí funcionaba un comercio usado para la venta de estupefacientes al menudeo y que el responsable era un empleado del Hospital de Niños, dedicado a tareas de limpieza, y que se hacía llamar “Fer, El Patrón”.

Con estos datos, la Policía comenzó a vigilar la zona y obtuvo filmaciones de cámaras de seguridad en las que se observaban movimientos compatibles con la venta de drogas en el kiosco. En los meses siguientes, incluso, se identificaron compradores.
A la vez, las autoridades se enfocaron en la figura de Pistone. Rápidamente, identificaron su rutina: detectaron que, al terminar su trabajo en el hospital, concurría a su domicilio de la calle 157 entre 71 y avenida 72, donde residía. Se movía utilizando distintos vehículos, entre ellos un Peugeot 208 blanco, una camioneta Toyota Hilux gris y un Honda Civic gris.
Los detectives también lo rastrearon en redes sociales, donde el acusado se presentaba activamente con el mismo alias, e invitaba a los usuarios a seguirlo en distintas cuentas, reforzando el personaje que construía tanto en internet como en el barrio.
Con las pruebas reunidas, la Unidad Funcional de Instrucción N°18 Especializada en Estupefacientes de La Plata, a cargo del fiscal Hugo Tesón, solicitó los allanamientos a la vivienda y al kiosco de Pistone.

Los procedimientos fueron autorizados por la jueza Marcela Garmendia, del Juzgado de Garantías N°5, y ejecutados este miércoles por efectivos de distintas comisarías y personal de caballería de La Plata de la Bonaerense.
En uno de los operativos, los agentes interceptaron a Pistone cuando intentó huir a bordo de su auto. El acusado se resistió: se enfrentó a la Policía y buscó arrebatar el arma reglamentaria de uno de los oficiales, aunque fue reducido sin mayores incidentes.
En total, durante los allanamientos se hallaron 436 gramos de cocaína de máxima pureza dividida en trozos compactos y envoltorios, 325 gramos de marihuana, dos armas de fuego (una pistola Bersa Thunder calibre .40mm con serie suprimida y un revólver Rubi .22mm largo), municiones de varios calibres, una suma total de 224 mil pesos argentinos, 2.200 dólares, tres balanzas, una máquina portátil para contar billetes, dos celulares, un DVR de cámaras, una tablet, una notebook, equipos de comunicación y anotaciones varias.
También se incautaron cuadros con la imagen de Pablo Escobar y gorras con la leyenda “Patrón”.

Para Pistone no es la primera causa judicial en su contra, tiene antecedentes penales previos. En 2013 recibió arresto domiciliario por disposición de un juzgado de garantías; en 2014 lo investigaron por infracción a la ley 23.737; y en 2023 fue imputado por tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil.
Ahora enfrenta nuevamente cargos por infracción a la ley 23.737, que penaliza el tráfico, la tenencia y el consumo de estupefacientes (en su caso es con fines de comercialización). Se esperaba su indagatoria para este jueves.