LIMA- “Dulce de leche” se lee con letras grandes de colores en la camisa de Hans Petersen, artista y director de Espacio 112, una de las seis galerías que debutan en Pinta Lima. En diciembre último ganó en Pinta Miami el Premio Next, dedicado a apoyar los proyectos emergentes, y decidió reinvertir ese dinero para participar en Perú de otra de las ferias de arte latinoamericano impulsadas por Diego Costa Peuser. La apuesta valió la pena: varias de las obras que expone se vendieron anoche a los invitados especiales que inauguraron su 12ª edición en el barrio de Miraflores.

Francisco, el Papa que cambió el rostro de la Iglesia

“Esto es emergencia pura”, dice el hijo de Christian Petersen, uno de los cocineros más reconocidos de la Argentina, sobre su propuesta. Titulada “Misión especial: arte argentino de exportación”, presenta por primera vez en Perú un menú “picante”. No hay nada desabrido, ni siquiera el montaje, en el conjunto que incluye obras suyas exhibidas junto con otras de Fernando Santana, Juana Cravero, Pedro Greco y Martín Agazzi, alias “El Keni”. El muralista sorprende con pinturas de gran formato que recrean escenas reales de la tradicional fiesta popular del Gauchito Gil, en Corrientes.

Obras de Martín Agazzi, alias “El Keni”, en la galería Departamento 112

A pocos metros de allí, en varios stands de las cuarenta galerías presentes Casa Prado se exhiben obras de Julio Le Parc. Hay un pequeño móvil entre las tres que presenta Pabellón 4 y otras en la galería chilena Prima, donde conviven con trabajos de su admirado Victor Vasarely, Pablo Picasso, Roberto Matta, Jesús Soto y Rogelio Polesello. También se pueden ver piezas de este último y del artista mendocino en la galería cordobesa Via Margutta, junto a una impactante pintura de Carlos Alonso de 1973: parecida a otra comprada el año pasado en arteba por el Museo Provincial de Bellas Artes Dr. Juan R. Vidal de Corrientes, Super carne II muestra a un hombre de traje con una bolsa en la cabeza.

Obras de Julio Le Parc en Pabellón 4

No menos impactante es una obra de Teresa Burga que forma parte de un conjunto cedido por coleccionistas e instituciones, a modo de homenaje. “Es una de las primeras pinturas pop realizadas en el país”, explica a LA NACION el curador Miguel Ángel López, que tuvo a su cargo junto a Agustín Pérez Rubio una muestra que le dedicó en 2015 el Malba a la artista, fallecida en 2021. “Es la primera vez que se muestra su obra desde entonces –agrega López-, y que se exhiben obras históricas con otras recientes”.

Obra de Teresa Burga, una de las primeras de arte pop realizadas en Perú

Otra colega peruana celebrada con stand propio por la galería Del Paseo –que ya vendió una obra suya, apenas inaugurada la feria- es Mariella Agois, fallecida el año pasado cuando el MALI acababa de inaugurar una retrospectiva. A ambas, los respectivos museos les dedicaron dos voluminosos libros. Tan interesantes como Crecemos porque nos juntamos, disponible online y enfocado en el proyecto de Textiles Semillas, un colectivo conformado por doce grupos de tejedoras y artistas del noroeste argentino. “Queremos poner de relieve la autoría de quienes hacen los oficios -apunta Alejandra Mizrahi, una de sus integrantes-. El valor está puesto en el encuentro”.

Silvia Arrozés, directora de la galería Del Paseo, en el stand que le dedica a Mariella Agois

El resultado sorprende en el stand de la galería porteña Linse en la sección Next, curada por Emiliano Valdés, que se presenta como “una polifonía de maneras de entender el arte como una forma no sólo de representar, sino de concebir y construir el mundo”. Justo al lado, en la sección Radar a cargo de Florencia Portocarrero, la recuperación de los saberes ancestrales también tiene un gran protagonismo en cinco propuestas que “nutren algunas de las discusiones más relevantes del arte contemporáneo en Latinoamérica”.

Instalaciones del colectivo Textiles Semillas exhibidas por la galería Linse en la sección Next

Sobre esos temas debatirán hoy invitados internacionales como María Sancho-Arroyo, experta en el mercado del arte y profesora adjunta en el Sotheby’s Institute de Nueva York; Pablo León de la Barra, curador de arte latinoamericano del Museo Guggenheim de Nueva York, y Manuel Segade, director del Museo Centro de Arte Reina Sofía. Se suman a una comitiva VIP de sesenta personas llegadas desde distintos países de América y Europa, entre las cuales se cuentan las coleccionistas Catherine Petitgas y Eliana Castaño.

Ishmael Randall-Weeks con una de sus obras exhibidas por Arróniz en la sección Radar

A todos ellos recibirán esta noche en un cóctel organizado por EFG Wealth Management, principal sponsor de la feria, Costa Peuser e Irene Gelfman, curadora global de Pinta. Ella tuvo a su cargo la dirección artística de este encuentro que continúa hasta el domingo y la sección Video Project, otra de las paradas imperdibles.

La sección Video Project, curada por Irene Gelfman

Para agendar:

Pinta Lima 2025, del 24 al 27 de abril en Casa Prado, Lima, Perú. Más en lima.pinta.art.